Capitulo 17

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BY MEGAN



Ya había pasado la fiesta de cumpleaños de Jessica y debo admitir que fue realmente buena, la madre de Elizabeth sí sabe organizar una fiesta, pero al parecer ésta no salió tan bien como ellas esperaban debido a que el famoso demonio se apareció, no llegué a verlo pero pude oír su conversación, al parecer le trajo un regalo a Jessica con un escalofriante mensaje en él. Pero esto no fue solo lo que pasó, Damon y Elizabeth discutieron de nuevo y según lo que me contó Damon, esta vez era definitivo ella quiso terminar la relación en un arranque de rabia, obviamente él estaba muy mal, pero siendo Damon no lo demostraba o por lo menos eso era lo que intentaba.

Eran cerca de las tres de la tarde, yo estaba leyendo uno de los libros de las enormes estanterías de la sala, cuando de pronto vi a Damon con una chica, él le estaba abriendo la puerta, al parecer había pasado la noche aquí, ella vestía una falda muy corta y un strapless a rayas, me incliné hacia delante para observarla mejor y vi marcas de dientes en una de sus piernas y en ambos brazos, luego de que se fue, Damon se sirvió un trago y se sentó en uno de los sillones.

—No deberías haber dejado que se fuera, al menos hasta que hallan sanado sus heridas.—le dije sin quitar la vista del libro que tenía en mis manos

—No te preocupes por lo que pueda llegar a ocurrirme.—me dijo despreocupado

—Dime, ¿Elizabeth sabe que haces esto cuando estás deprimido?

—Ya basta, no quiero hablar de ella. Y no estoy deprimido solo me divertí con una chica anoche.

—Bien, como quieras.—dije rodando los ojos.

—Hey, ¿qué dices si salimos esta noche?—me dijo con una sonrisa pícara.

—¿Qué se te ocurre?

—Bueno ya sabes, buscamos unos cuellos que morder, nos embriagamos... como en los viejos tiempos.

—Suena interesante.—le dije sonriendo

Dos horas más tarde ambos nos encontrábamos sentados en las largas barras del Mystic Grill con un trago en las manos, mientras esperábamos que nuestra presa apareciera.

—Debo admitir que extrañaba hacer esto.—me dijo dándole un sorbo a su bebida.

—Lo sé, soy la mejor compañera que tendrás.—respondí con una sonrisa mientras recorría el lugar con la mirada.—La pelirroja a tu derecha no te quita los ojos de encima.—le informé.

De pronto mis ojos se detuvieron en un chico en las mesas, éste estaba solo y tenía su mirada fija en mí.

Bingo.

—Creo que es a ti a quien mira en realidad.—se me escapó una carcajada cuando lo oí hablar, luego Damon se puso de pie y fue hacia la chica que acababa de mencionarle.

Te amaré eternamente (UAD 2ª parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora