Snowfall

XV. Malos recuerdos

Hola a todos feliz lunes, espero estén muy bien, aquí está el nuevo capítulo, disfrútenlo y no olviden votar y comentar.

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Un par de semanas habían pasado desde aquella tarde donde Kara dejó a Lena en la puerta de James, en el pueblo ya habían formado grupos para ayudar en las reparaciones y preparativos para una posible onda gélida, Kara había participado activamente en los grupos. Ayudando a dirigir y organizar, la gente parecía escucharla bien y acataban bien sus órdenes, al estar cerca de las reparaciones, Kara convivía mucho con Lena, la pelinegra se mostraba amigable y abierta a los cumplidos y las ocasionales caricias que nuestra rubia intrépida le regalaba.

Para Kara los días trabajando con Lena fueron agradables, la mujer era bastante estricta y perfeccionista a la hora de trabajar, tenía a los equipos perfectamente organizados y siempre ayudaba a resolver cualquier inconveniente, tenía una habilidad natural para dirigir, eso la hacía aún más perfecta a los ojos de Kara, que lo único que quería hacer era ir hasta donde estaba Lena y besarla hasta perder el aliento por completo.

Aunque desgraciadamente solo compartían besos cuando dejaba a Lena en casa de James, estaba bien. Pero necesitaba tocar a su chica genio, sentir la piel caliente de Lena en sus manos, por eso se estaba dando prisa en limpiar todos los malos recuerdos de su casa, para poder empezar una nueva y mejor vida al lado de Lena.

Había comenzado sacando las cosas que su ex esposa había dejado en su habitación, no eran muchas, Maggie se había llevado la mayoría el día que huyó, solo quedaban algunos zapatos altos y algunos vestidos, además de los perfumes y cremas que solía usar, todo lo fue metiendo en cajas y en bolsas, quería deshacerse de eso de una vez.

Tenía todas las cosas de la habitación ya guardadas en una caja cuando escucho pequeños pasos que venían apresurados por el pasillo, la puerta fue empujada con fuerza y Mouse entró en la habitación, estaba agitado por subir corriendo.

-Hola pequeño, ¿Qué pasa amigo?, Supongo que quieres salir. - El lobito gruñó y comenzó a corretear por la habitación. - Vamos te llevaré al patio.

Mouse al ver a Kara levantarse se emocionó mucho más, en una de sus vueltas, golpeó la caja que Kara había dejado en medio de la habitación, el contenido se derramó y el lobito tomo entre sus dientes un vestido negro y salió corriendo, Kara iba a quitárselo pero entonces se dio cuenta que no podía importarle menos ese vestido, después de todo siempre lo había odiado.

...

Cuando el autobús se detuvo en la calle principal del pueblo, Kara se sintió bastante feliz y emocionada, pues por fin estaba regresando a su hogar después de meses de servicio, si bien no lo estaba haciendo de una manera buena, ya que la habían puesto en descanso debido al disparo que había recibido en el hombro, lo importante era que estaba en casa y podría ver a su familia y a su esposa.

Kara descendió del vehículo y comenzó a buscar el auto de Maggie, pero no lo veía por ninguna parte, su esposa tenía que estar ahí, Kara le había llamado hace tres días para decirle que la habían puesto de permiso por su herida, le dijo que volvería a casa en ese autobús, pero al parecer a Maggie se le había olvidado pasar por Kara, resignada y triste, lavando su mochila y la colgó en su hombro sano y comenzó a caminar a casa, no estaba muy lejos, solo a diez minutos a pie.

Las calles estaban solitarias y frías, el invierno llegaría pronto, solo algunos negocios estaban abiertos, una cafetería y el pequeño restaurante del pueblo, además del mini súper de veinticuatro horas, todo estaba muy tranquilo esa noche, Maggie no tenía por qué haber olvidado que ella llegaría, no había disturbios en la ciudad que requirieran la presencia de la jefa de policía, Kara suspiró cansada y decidió no pensar en eso, seguramente había una buena explicación para todo.