III

592 93 20
                                    

Han pasado varias semanas desde la segunda vez, me gustaría decir que jamás se volvería a repetir su estancia en urgencias, pero es algo que ni siquiera yo puedo autoresponderme.

Hasta que otra vez sucedió.

Me encontraba de camino al hospital cuando la veo, una morena presionando fuertemente su abdomen y un idiota rompiendo su blusa en un callejón, mi sangre comenzó a hervir, como es posible que estas cosas sucedan y nadie se digne a intervenir de alguna manera.

Detengo mi auto y después de una pelea en donde sin tocar al agresor, ya que este se encontraba en estado de ebriedad, tomo a catra casi inconsciente y la subo a mi auto dispuesta a llevarla rápidamente a urgencias.

-¿Qué haces Prince?- susurra

-Te salvo, niña- respondo con un leve e imperceptible tono de preocupación

-No lo hagas- la miro incrédula

-¿Qué quieres decir?- intento concentrarme en el camino

-Estoy cansada, si me salvas, me veré obligada a morir.

Y es así como solo cayó inconsciente, preocupándome aún más.

-Estarás bien- dije acariciando suavemente su cabello

Luego de lo que pareció un eterno chequeo, Catra fue derivada con urgencia al quirófano, su doctor asignado es uno de mis mejores amigos, Bow, la verdad es que hubiese preferido encargarme personalmente, pero bueno, no creo que sea lo mejor, así que, confiaré su vida a Bow.

Me encuentro en la sala de espera, finjo leer una revista médica y solo me dedico a esperar.

-Adora, ¿Qué crees que haces?

-Glimmer, que coincidencia, solo quería leer una revista- intento sonar casual- ya sabes, adelantos médicos, lo último en tecnología e investigaciones, es, es interesante, ya sabes, somos doctores y esto nos gusta, porque es ciencia y la ciencia es...

-Basta Adora- me interrumpe- ambas sabemos que odias leer revistas a no ser que sean de tus artistas musicales favoritos.

-Te equivocas-digo con falsa indignación- esto es lo último en ciencia

-Te lo demostraré- me mira desafiante- léeme la fecha de publicación de esa revista

-2009- dije orgullosa de encontrar la fecha inmediatamente

-Estamos en el 2020 idiota- grita agitando sus brazos

-Está bien, me atrapaste- Creo que el estafador fue estafado, me regaño mentalmente- solo quiero saber el estado de la chica que ingresé a urgencias esta mañana, no se veía bien- Glimmer me mira incrédula- ¡Qué!, no me mires así Glimmer

-¡Oh por Dios!-Glimmer tapa su boca con ambas manos

-No es lo que piensas- dije exaltada- es solo un estúpido dilema moral

-Lo que tú digas doctora Prince- me sonríe satisfecha y se retira dejando más dudas en mi cabeza que nunca.

Después de unas horas, Bow aparece preocupado.

-¿Qué sucedió?- pregunto preocupada

-Adora, está muy débil, intento comunicarme con algún banco de sangre cercano y nadie responde, no tenemos su tipo de sangre y su tiempo se agota- agacha la mirada

-¿Cuál es su tipo de sangre?- pregunto

-AB negativo- es escasa y bastante rara, creo que ya lo sabes

-Vamos- comienzo a caminar

-¿A dónde?- pregunta desconcertado

-Seré donante, yo tengo ese tipo de sangre- respondo intentando esconder mi evidente preocupación

-Adora, ¿Estás segura?

-Apresúrate, el tiempo se agota- ambos nos miramos unos segundos y corremos en dirección al apartamento de donaciones de sangre.

Y aquí me encuentro, recostada en un sillón bastante cómodo, comiendo una galleta y tomado un jugo de naranjas en caja para reponerme después de mi extensa donación, creo que cuando esa chica se salve y despierte, ambas tendremos una larga conversación.

Luego de varias horas, recibo un mensaje de Bow.

BOW

-Está fuera de peligro, fue un procedimiento bastante complejo, unos minutos más y se nos muere en la mesa de operaciones.

ADORA

-Gracias Bow, es una gran noticia que esté fuera de peligro. J

BOW

-Habitación 512, terapia intensiva por si te interesa.

No respondí, simplemente me levanté ya sintiéndome mejor y me dispuse a buscar a Catra.

Ya en terapia intensiva, fingí realizar rondas, solo con un objetivo en mi mente, habitación 512. Ya al interior de aquella habitación, observo a la morena dormir tranquilamente, sus rasgos son tan delicados, sus ojos, su nariz, sus labios, su bello cabello. Y sin ningún tipo de permiso, procedo a quitar uno de sus mechones de su rostro y posicionarlo detrás de su oreja.

-Eres tan frágil- susurro- algo en ti me obliga a buscarte, y no descansaré hasta averiguarlo, niña- la miro por última vez antes de dirigirme hacia la salida.

Ha pasado un día luego de su operación y me dispongo a buscar a Catra, creo que es hora de hablar seriamente y de una vez por todo saber qué diablos está sucediendo con ella.

Me encuentro a fuera de su habitación, hasta que escucho un quejido alarmante en el interior

-¿Estás bien?- pregunto entrando a su habitación

-¡¿Qué hago aquí?!- me mira asustada, enojada, frustrada, un mar de emociones

-Estabas mal herida, casi mueres, niña- me mira irritada

-No me llames así, Prince- dice molesta

-Entonces deja de comportarte como una y responde- dije con un tono serio- ¿Qué está sucediendo contigo?

-No te incumbe, ahora sácame estas cosas, dame analgésicos y déjame ir de una vez por todas- la miro incrédula

-Ni lo pienses, casi acabas de despertar de un procedimiento en el cual casi no sobrevives, porque la niñita tiene un tipo de sangre tan escaso que si no hubiésemos encontrado en el tiempo que lo hicimos, ni siquiera estarías respirando- dije molesta

-¡Te dije que no me salvaras!- aparta su mirada

-¡Pues que mal, mocosa arrogante-la miro indignada- porque ya lo hicimos!- sus ojos comienzan a cristalizarse, soy una idiota.

-Hey, no llores- dije calmadamente- ya estás bien, estarás bien

-No lo entiendes Prince- susurra

-Explícamelo- intento persuadirla

-Sólo mantente lejos de mí- y simplemente se recostó cerrando sus ojos, intentando escapar de mi interrogatorio.

-Descansa- dije resignada, saliendo de su habitación.

Corazones rojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora