Del Otro Lado [Trono #1]

III

Hannah

Suspiró, mientras resisto la aguja que atraviesa mi piel cuando la enfermera la pasa por mi herida en la frente, sin duda fue una herida más profunda, yo creía que solo era un aruño

—Lo siento tanto — susurra, y ruedo los ojos viendo a algún punto detrás de ella

—¿Por qué específicamente?— pregunto en respuesta, la veo apretar los labios y eso me hace rodar los ojos

—No entiendo tu pregunta — asegura, antes de terminar lo que sea que hizo en mi frente y poniendo algo para cuidarla

Me río de su respuesta, y detengo su mano cuando está limpiando mi labio

—¿Ah no?— pregunto con sarcasmo a lo que yo sacudo la cabeza — entonces contestame, ¿Cómo tu hija de dos años paso la frontera sin ser notada y termino en mi pueblo?

Baja las manos y se rinde con mi herida para girar la cabeza, y río sin apice de gracia, sacudiendo la cabeza y rechazó su incapacidad pues igual no me la van a valer, salgo de ahí, porque se que oculta algo más, una bebé no pudo pasar por su propia cuenta

Y siento que todo lo hicieron para que alguno de nosotros, llegara a este lado, coloco el hielo sobre mi labio y camino al aula de clase, ni siquiera me apresuro a correr porque igual se que tendré que pasar por un castigo, así que solo sigo caminando, me encuentro con los dos idiotas mayores — Nathaniel y Aarón — y los ignoro, mi nuevo corte de cabello de seguro también fue obra suya

Aquí todos sabemos que Stacy no hace nada que Aaron le disguste, así que solo entro y me siento en mi lugar, viendo al frente cuando la voz de la sra Goodwin me saca de mis pensamientos y me hace levantarme

Aquí vamos de nuevo

* * *

—Vamos, no quiero terminar tarde hoy — le expreso a Lucia que me ve y suspira sosteniendo las tijeras — después me arreglas el cabello, no quiero terminar tarde, ya te lo dije

Asiente y cambia su ropa rápidamente, antes de salir por la puerta, cuento el dinero que tengo, es poco lo que nos colabora el rey, y la enfermera muchas veces nos da por debajo de la mesa, para no meternos en problemas, masajeo mi cabeza, guardo el dinero en el bolsillo y salgo de la casa intentando trenzar mi cabello

Cómo lo sospecho, por el corte de mi cabello, queda mal hecha y suspiró, subiendo a la buseta que nos lleva al mercado, me siento y observo por la ventana, ignorando las miradas de burlas y asco que nos dedican

—¿Te falta algo más de lo de la lista?— le pregunto a Lucía quien sacude la cabeza, antes de bajar la cabeza — ya te he hablado de esa maldita actitud sumisa

—Señorita...— enarco una ceja, y ella infla sus mejillas — Hannah... No puedo evitarlo, me criaron para servir, además mi aspecto no ayuda mucho a no tener autoestima

La misma excusa de siempre

—Lucia no estamos en nuestro pueblo, aquí no sirves a más nadie aparte de ti, y si no sacas valentía y te paras firmes, te van a destruir — es lo que termino diciendo, así que el resto de viaje solo la ignoro, porque estoy tan cansada y estresada de estar aquí que me molestó con todo el mundo

Incluso con la única amiga que tengo

Aunque mentiras no le estoy diciendo

Este pueblo es un asco

* * *

Reviso las cosas que hemos comprado, y camino a la siguiente tienda, entro para revisar los implementos básicos de aseo, que es lo que nos falta