Capítulo 33: La historia de Alissa (2da Parte)

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—La primera vez que supe que las cosas no iban nada bien, tenía quince años de edad… —Alissa adoptó un tono de voz neutro y firme mientras ordenaba sus pensamientos y el viento agitaba ferozmente su blusa hacia un costado.

La noche había caído finalmente y un centenar de estrellas se alzaban en lo alto cual centinelas vigilando la íntima conversación. Albert Colt había sumergido los pies en el agua que para aquel momento estaba cálida y muy apacible. Miraba a Alissa a pesar de que esta observaba el firmamento que se extendía ante ellos.

“—En ese instante no sabía qué las cosas estaban muy mal porque apenas era una adolescente y no era consciente de tales episodios. Pero, con el paso del tiempo comprendí que mi vida iba a ser distinta e insufrible.

Alissa tragó saliva e hizo una leve pausa. Su corazón golpeaba su pecho, con incesante dolor. Albert le miró con detenimiento. Se aproximó a ella y le tocó la espalda con gesto cariñoso. Eso le otorgó las fuerzas que ella necesitaba.

La reconfortó.

—Fui abusada sexualmente cuando era apenas una adolescente. —confesó a media voz.

Entonces la mano de Albert se detuvo en el proceso.

—¡¿Qué?!

La respuesta de él fue verdaderamente sincera. No había podido pensar en nada parecido, ante tales palabras, y no tener un momento de absoluta rabia y consternación.

—¿Un hombre… abusó de ti?

Ella asintió en silencio y las lágrimas descendieron su rostro en contra de su voluntad. Se sentía expuesta y una extraña sensación de temor y vergüenza le recorría su cuerpo.

Era la primera vez que contaba aquel secreto.

Ambos quedaron sumidos en un incómodo mutismo que podía romper cualquier cristal que se atravesara ante él. Sin embargo, Alissa no iba a dejar las cosas a medias. No estaba segura de cómo lo haría pero debía seguir en aquella vorágine de emociones encontradas que sentía tras abominable revelación.

—En esa ocasión lo consideré algo nimio para mí. —explicó ella—. Sólo era una chica inocente en un mundo abrumado y poco adecuado para convivir. Ese día, papá estaba en casa con varios amigos y uno de ellos, totalmente borracho se metió a mi cuarto y sin poder evitarlo, pasó lo inimaginable.

A unos cien metros de ellos alguien gritó con emoción.

Alissa giró la cabeza y observó como en una construcción de madera en forma de casa se encendían las luces en las cuales varias bombillas de color amarillo se colgaban en una fina cuerda que terminaba en dos enormes barrotes que se alzaban hasta el inicio de la húmeda arena. El lugar quedó tenuemente iluminado y las sombras se reflejaban en el agua cuyas olas rompían lentamente. Varias personas se aglomeraban debajo de las bombillas y tomaban asientos en pequeñas mesas mientras la música de fondo comenzaba a sonar.

Era un sonido ligero y sutil, parecía un guiño propio para la ocasión ya que era la música perfecta para confesiones y momentos de cierta incomodidad.

“—Al cabo de varios días volví a ver al hombre en compañía de papá pero sus amenazas fueron muy evidentes y entonces mi primo Gregor se dió cuenta de todo aquel ultraje, y casi intentó matarlo allí mismo. —Alissa hizo una pausa—. Claro que mi padre no se enteró de eso pero me pareció algo extraño que jamás volví a ver a ese hombre, pero entonces... pasó algo más... comencé a sentir afinidad hacia mi primo. Quizás por mi cruda inocencia, pensé que era el hombre perfecto ya que me había salvado de todo el mal que me habían causado..., pero apenas era el comienzo de mi verdadera pesadilla.

Secretos de una ninfómana 🔞 (Completo)✅ (En físico) 😍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora