La Vida Después De Una Traición (NaruHina)

7

¿Cuánto estas dispuesto a soportar? ¿Cuánto vas a sufrir? ¿Cuánto vas a permitir? esas preguntas atacaron a nuestro rubio que, caminaba sin rumbo como aquella noche que se había enterado del engaño de aquella mujer. se sentía destrozado, se sentía realmente roto. esa mujer sabia como lastimar sus sentimientos, sabia como ilusionarlo y sabia perfectamente como usarlo. 

por algún motivo extraño, nuevamente había caminado una gran distancia sin darse cuenta de aquello. literalmente estaba muy cerca del hogar de Hinata.-¿Ella querrá verme?- en su mente no era esa la pregunta, realmente la pregunta era ¿Podré verla? ¿Podré observarla a los ojos? Para Naruto esto era realmente un problema, se sentía sucio, realmente asqueado con su persona... ¿y como no hacerlo? acababa de besar y despedirse internamente de Sakura. si bien para el fue necesario reafirmar que la odiaba, no debió besarla.

-no debí hacer eso-en su mente sintió el verdadero asco de haber compartido algo tan privado, algo tan importante, algo tan necesario con una mujer que no se lo merece. pero mientras caminaba razono algo. los besos con Sakura estaban vacíos, ese beso en la parada del bus fue totalmente animal, fue totalmente primitivo-no te amo-murmuro nuevamente sabiendo que, en su interior por primera vez el había aceptado que, Sakura no valía nada.

sin meditarlo, ya se encontraba en la esquina de la casa de Hinata-¿que estoy haciendo?-en su mente se estaba equivocando, pero en su corazón la decisión era la correcta. se acerco a la puerta de su prometida y de un par de golpecitos llamo a la puerta. la pelinegra tardo poco en abrir, sorprendiéndose por encontrarse a Naruto a esas horas de la noche-Naruto-kun... ¿Qué haces aqui a estas horas?-la pelinegra se hizo a un lado de la puerta.

-yo... me siento perdido-el nuevamente se sintió adolorido por dentro-se exactamente donde estoy-Hinata tomo la mano de Naruto y lo atrajo dentro de su casa.-pero me siento... A la deriva-

-estas en casa-la chica abrazo al gran hombre que, para ese momento se derrumbo.

-eres buena-el se aferro a Hinata-eres una buena persona... honesta y bondadosa-el rubio se sintió destrozado nuevamente-nada que ver con ella-Hinata se mantenía abraza a Naruto mientras que escuchaba atentamente lo que el tenia para decir-quiero...-¿podía decirle a Hinata que la había engañado? ¿tenia el valor para ver su rostro? no-yo quiero tomar algo caliente... charlar contigo, reír... olvidarme de todo-Hinata asintió y palmeo la espalda del rubio.

-esta bien Naruto, voy a preparar algo para ti. si deseas puedes tomar una ducha-este asintió y emprendió viaje hacia el baño. Por su parte Hinata se puso a cocinar algo enfadada, le molesto lo que vio en la revista esa mañana "con mí ama de llaves no hay nada" esa frase le estaba causando enfado y realmente quería respuestas sobre aquello, pero verlo al rubio tan derrumbado la acomplejaba. Perdía las ganas de indagar sobre el tema. Al poco tiempo ella terminó de preparar algo rico que se le antojo-supongo que era a libre elección-una pequeña risita se escapó de sus labios al observar la rica comida que había preparado.
Llevo las cosas a la mesa y se sentó con su celular a ver las noticias, no paso mucho hasta que el rubio se sentó frente a ella.
-huele delicioso- el joven tomo la taza de café y la acercó a su nariz para aspirar el aroma. por su parte Hinata enterneció su mirada hacia Naruto, su sinceridad le encantaba por lo que verlo disfrutar de su comida la hacia sentirse feliz, inclusive olvidaba su enojo previo. pero la realidad en ese momento llamaba a la puerta, Naruto había hablado y la había excluido realmente-amo tu comida-el muchacho sonreía gustoso, pero de un momento a otro se detuvo-¿porque no comes?-el miro a Hinata fijamente que sostenía su celular en una mano y el café en la otra. desde que lo sirvió no lo toco, solo lo sostuvo en su mano intentando atrapar ese calor que la taza transmitía.

-¿Por que le mentiste a la prensa ayer?-Hinata soltó su taza y oculto su mirada en su celular, iba pasando de articulo en articulo tratando de prestar atención a lo que su prometido iba a decir.