Nuca me Aleje - 36

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Steve se puso de pie y se asomó por la ventana, tenía que avisar que Aldo estaba bien. Tomó el celular de Aldo y lo desbloqueo. Entró a WhatsApp y le envió un mensaje a su mamá diciendo que estaba bien y que estaba en la casa de Steve. Que se había doblado el tobillo pero que estaba bien.

Steve dejó el teléfono a un lado. Aldo comenzó a moverse, Steve lo miró. Sabía que Aldo se estaba despertando.

Steve. ¿Donde estas? — preguntó
Aquí estoy, no hagas fuerza aún estás algo débil. — respondió mientras se acercaba.

Tengo que ir a casa, mi mamá me ha de estar buscando. — dijo con poca voz

Tranquilo, ahorita te llevamos a tu casa, solo quiero que estés bien. — dijo steve.

Steve se puso de pie y camino hacia la puerta, iría buscar a su mamá para que revisara a Aldo.

Porque nuca me dijiste que eras un vampiro. — preguntó Aldo.

Steve se quedó helado. Cerró los ojos, era el momento de enfrentar esa situación. Steve se giró y lo miró.

No quería... — Se quedó callado — no quería que te asustaras o tuvieras miedo, tenía que aparentar que era un humano común como los demás. Solo así podía estar cerca de ti. — dijo Steve.

Desde que comencé a notar que eras diferente, sabía que algo ocultabas. Llegue a la conclusión de que eras un Vampiro desde hace mucho. Pero me faltaban pruebas y cosas para estar muy seguro de eso. — respondió Aldo.

Si, sabía que eras algo curioso y no estarías tranquilo hasta saber la verdad. — dijo Steve

Tú sabes quien mato a tavo. — preguntó directo

Steve agachó la mirada y camino hacia el. Se sentó en la cama y tomó su mano.

Si, fue la hermana de Thiago. Regina. — dijo Steve

Aldo cerró los ojos, las lágrimas comenzaron a salir, recordó aquella vez que vio a Tavo pedir ayuda bañado en sangre. Aldo miró a Steve y notó que tenía lágrimas en sus mejillas. Aldo las seco con su mano.

Porque lloras? — preguntó Aldo.
Porque tengo miedo a que te alejes y me dejes ahora que se que te quiero a mi lado para siempre. No quiero perderte, No soy un Monstruo como dijo Thiago yo deje de beber sangre humana hace muchos años. Yo no soy un Monstruo. — dijo Steve entre lágrimas.

Por eso nuca me aleje — dijo Aldo mientras tomaba su mano.

Steve lo volteó a ver... Aldo lo miró tiernamente.

Que dices... — preguntó Steve

Si, por eso nuca me aleje de ti, yo sabía perfectamente lo que eras, pero también me di cuenta que no eras malo. Porque siempre tratabas de protegerme y nuca me lastimaste. — dijo Aldo.

Steve lo miró y tomó sus mejillas dándole un beso tierno y sincero. Steve recargó a Aldo en la cama y continuaba besándolo. Estaba perdidamente enamorado de ese chico. Steve se separó de Aldo.

¡Te adoro! — dijo Steve mirándolo a los ojos.

La mamá de steve se acercó a la puerta y tocó, al abrió y miró a Steve acostado en la cama con Aldo, ella entró y se acerco.

Como sigue? — preguntó la mamá de Steve.
Ya despertó, solo dejare que descanse hoy y mañana lo llevaré a su casa temprano. — dijo Steve

Su mamá salió del cuarto, Aldo dormía en el pecho de Steve. Dormía tranquilo y protegido por Steve. El contemplaba su sueño.

Thiago estaba sentado en la orilla de su cama mirando hacia la ventana. Estaba molesto. Pues Steve nuca dejaría que nadie se le acercara a Aldo.

Disfruta tu romance mientras dure Cantú. — dijo Thiago.

Thiago miró a la luna. Y se fue a cazar.

Al día siguiente... Aldo despertó y se levantó rápidamente.. miró hacia todos lados y miró que no estaba en su cuarto. Talló sus ojos, no sabía donde estaba, quitó la sábana y se puso de pie, camino hacia el baño y se miró al espejo. Miró que tenía varios moretones y las marcas de unas uñas en su brazo derecho. Aldo se recargó el lavo y miró su cara. Se sentía algo extraño. — ¡Aldo! Dijeron su nombre y miró hacia la puerta del baño.

Estoy en el baño — grito Aldo desde adentro.

Steve dejó la charola de la comida que traía para Aldo. Espero que saliera. Al poco tiempo Aldo salió y camino hacia la cama.

¿En donde estoy? — Preguntó Aldo.
Estás en mi casa, anoche te traje para acá. No lo recuerdas? — preguntó Steve.

No, bueno nunca imagine que me hubieras traído a tu casa — dijo Aldo mientras se acomodaba

Steve se puso de pie y tomó la charola con el desayuno para Aldo. Se acercó a él y lo puso en la cama.

Toma, desayuna algo antes de que vayamos a tu casa. — dijo Steve algo amoroso.

Aldo miró un desayuno súper rico. Hot Cakes, algo de jugo de naranja, fresas picadas y una taza de café. También había un vaso de unicel algo grande. Aldo lo miró y miró a Steve.

Qué hay en el vaso de unicel? — preguntó Aldo
Steve miró su vaso y lo tomó.

Es sangre de venado, es con lo que me alimento, llevo una dieta de 50% consumo de alimentos y 50% consumo de sangre animal. Es así como me alimento. — dijo Steve tomando su vaso

Y no consumes sangre humana como el vampiro que me atacó? — preguntó Aldo

Es muy raro, tengo mucha fuerza de voluntad para no consumir sangre humana. — respondió Steve.

Wow Vampiro que no consume sangre humana tal y cual cómo los de cre...

¡Oye! Es un insulto para mi eso eh! — dijo Steve recargándose en la pared.

Aldo sonrió y comenzó a comer lo que la mamá de Steve le había preparado. Steve contemplaba como Aldo comía su desayuno. Después de un tiempo Aldo se puso de pie y salió de la cama. Tenía que regresar a su casa mamá estaba algo preocupada por el.

Listo? — preguntó Steve
Si, estoy listo. — dijo Aldo

Los 2 salieron del cuarto de Steve. Bajaron por las escaleras y llegaron a la entrada de su casa. Aldo miró que estaba rodeado por miles de árboles, una neblina cubría el bosque.

Wow que hermoso se mira desde aquí el bosque. — dijo Aldo

Es hermoso, por algo vivimos lejos de la ciudad. — dijo Steve.

Y nos iremos en tu coche? — preguntó Aldo

Steve soltó una pequeña carcajada y camino hacia Aldo.

De que te ríes, dije algo chistoso o que? — dijo Aldo mientras cruzaba sus brazos.

Steve tomó los hombros de Aldo y se acercó a él.

Para que quieres ir en auto cuando tienes a un vampiro que corre más rápido que un coche. — dijo steve dándole un beso en la frente.

Entonces me llevarás? — preguntó Aldo
Claro, sube a mi espalda y te llevare a tu casa. — respondió steve

Steve se agachó un poco para que Aldo pudiera subir... Aldo subió a su espalda y abrazó fuerte a Steve. Este lo miró y sonrió.

Agárrate fuerte — dijo Steve mientras antes de salir corriendo veloz hacia el bosque.

BLACK MOON Donde viven las historias. Descúbrelo ahora