Ya dentro del auto de la rubia nos dirigíamos hacia el sitio en el cual cenaríamos , Jisoo y Rosé se encontraban sentadas en la parte delantera, ya que ésta pasó por la pelinegra antes de llegar a casa.
Ambas se veían hermosas, lo que aparentaba una simple cena se transformó en algo formal sin que ninguna tuviese la intención. No recordaba la última vez que vi a la pelinegra con un vestido de ese tipo, escotado y más revelador de lo habitual. En cuanto a Rosé su atuendo era más sencillo, un suelto vestido blanco que combinado con su color de cabello la hacían ver realmente hermosa, no culparía a Lisa si se fijara en ella.
-¿Hacia dónde nos dirigimos?- al escuchar la pregunta de la pelinegra comencé a prestar atención a su conversación, buscaba escuchar la respuesta, llevábamos mas de media hora conduciendo por lo que el sitio definitivamente estaba fuera del centro de la ciudad.
-Es una sorpresa, si te lo dijera perdería el sentido- el rostro de mi amiga era sumamente gracioso, una enorme sonrisa reflejándose en sus labios. Temía que ella saliera herida en todo este "juego" que al parecer la rubia llevaba con ella.
-Lis..- susurré para que ella fuese la única receptora del mensaje- ¿hacia dónde nos dirigimos?- su risa me descolocó, ¿es que acaso pensaba no contestarme?
-Deberás esperar al igual que Jisoo, ¿desde cuándo tu tienes privilegios?
-Esto no se va a quedar así, ya vendrás tu a pedirme algo.
-No seas rencorosa, solo no quiero arruinar la sorpresa, cambia esa cara- mi expresión había cambiado, debía admitir que en algunas ocasiones me comportaba como una niña caprichosa, pero era parte de mi, intentaba cada día controlarlo.
Casi diez minutos mas tarde finalmente llegamos al dichoso sitio, el cual jamás había pisado, era completamente nuevo para mí, al igual que para la pelinegra.
Al ingresar fue una total sorpresa la forma en la cual estaba ambientado el lugar. Una combinación entre elegante y rústico, lo que más me sorprendía eran las paredes, las cuales eran completamente de vidrio, al igual que el techo. Brindando una vista excelente de los alrededores y el cielo totalmente despejado.
Aparentemente se encontraba en medio de un bosque, ya que algunos árboles eran parte de la estructura, simplemente sensacional.
El sitio estaba repleto, tan solo unas pocas mesas aún estaban libres. Tomamos asiento en la que se encontraba en el centro, rodeadas de varias personas. El leve sonido de la música provocaba que quisieras tomar una copa de vino y relajarte completamente.
-¿Qué tal? por favor díganme que no conocían el sitio- Rosé estaba ansiosa de nuestra respuesta, quizás dándole mas importancia de lo que creía.
-Por supuesto que no, no es fácil encontrar un sitio con este ambiente en el centro de la ciudad, es realmente maravilloso.
-Te dije que no conocerían su existencia- la chica burlaba a Lisa que asentía dándole la victoria a una probable apuesta entre ellas.
-Tomemos asiento, muero de hambre- como de costumbre Jisoo siendo Jisoo.
Las cuatro nos sentamos distribuidas en asientos de dos en dos, por lo que las dos chicas terminaron una a un lado de la otra y Lisa a mi lado.
-Recomiendo que prueben el platillo de la casa, la pasta es la especialidad del lugar- la más alta era posiblemente una cliente frecuente ya que recomendaba platillos y bebidas, a pesar de que ella no consumiría nada de alcohol ya que era la responsable de llevarnos a casa.
Contra todo pronóstico mi cuerpo por algún motivo rechazaba la ingesta de alcohol ese día, quizás en otra oportunidad cumpliría con el deseo de degustar alguna de sus bebidas. Como si se tratara de una especie de pacto silencioso ninguna de las 4 ordenó nada que contuviese ese líquido en ella.
ESTÁS LEYENDO
Play of Fate- Jenlisa
FanfictionUn año después del accidente que cambió su vida, Jennie decide enfrentarse a uno de sus más grandes miedos. ¿Que pasará cuando esa misma noche una extraña se atraviese en medio de la carretera y cambie por completo sus planes? -Historia original. -S...