Capítulo 22. 🦋🐍

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Cheryl.

12 de diciembre...

Estaba a punto de ir a buscar a los chicos para hacer galletas cuando me di cuenta de que el silencio reinaba en la casa, era tan pacífico que de repente, entré en pánico.

- ¡CHICOS!- los llamé.- ¡QUE...!- las dos sanguijuelas se voltearon hacia mí, estaban cubiertos con jabón en polvo y en el piso ya había agua formando burbujas.

Los asesinaría, pero era muy joven para ir a la cárcel. Respiré hondo y les sonreí falsamente.

- Tía Cheryl...- Anthony arrastró sus palabras.

《Tía...》

- Fue él.- Levie culpó al niño y éste la miró confundido un momento pero terminó dando un paso al frente.

- Fui yo.- admitió con la frente en alto, sabía que estaba mintiendo y me causó ternura. Levie siempre era la cabecilla así que sabía que Anthony sólo hacía lo que ella le ordenaba.

- No me importa quien tuvo la culpa.- los regañé y ambos bajaron la cabeza, Levie era una total actriz, a ella no podía importarle menos el ser regañada pero me sentí mal por Anthony...- ahora mismo van a bañarse, hablenle a la tía Bea para que les ayude.- empezaron a salir.

- Si, Tía Cheryl.- dijeron al unísono.

- Una cosa más, luego de que se limpien me buscan en la cocina, quiero hacer galletas con ustedes, ¿ok?- entrecerre mis ojos y ellos asintieron con ilusión.- ahora se me van directo a la ducha, no quiero más desastres. Y que Levie se bañe primero.- asintieron y desaparecieron rápidamente entre risitas. Estaban emocionados por hacer las galletas cosa que me hizo sonreír a mi también en medio de todo ese desastre.

Jughead entró al cuarto de lavandería con el ceño fruncido y una canasta con ropa para lavar.

- ¿Hubo algún terremoto del que no me enteré?- comentó un tanto preocupado.

- Cállate o te haré limpiarlo.- empecé a escurrir el agua.

- Te ayudaría con mil gustos, es sólo que Vero me pidió poner esto a lavar.- señaló la ropa.- mañana necesita usar el uniforme porque va a trabajar en Pop's por la tarde.- pensó un momento.- de hecho, trabajaremos, juntos.- sonrió, rodé los ojos.

- Tengo suficiente con verlos besuqueandose por todos lados, no necesito que me cuentes tus planes románticos.- me di cuenta que sólo estaba allí parado sin hacer nada.- ¿Y qué mierda esperas? ¡Muévete y ven a ayudarme!- bajó la canasta y me ayudó.

- Eres insoportable.

- Gracias.- le guiñé.- ese era el objetivo desde el principio.

- Ni te costó nada, se te da naturalmente.- le dediqué una mirada furiosa y se alejó un poco receloso.- Ya, terminé.- comentó después de un tiempo en silencio mientras sacábamos el agua, su teléfono comenzó a sonar, miró la pantalla y yo levanté una ceja al ver su rostro.

- Es Betty.- dijo.

- Y... ¿A caso siguen habl...?

- Más bien, su abogado.- me interrumpió.- yo quiero pasarle dinero por Maddie y ella sólo quiso que hable directamente con este señor.

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