Losing Game (Dark Angel VIII)

Capítulo XXXV

    Pasada la media noche fue que todos se retiraron a sus respectivas habitaciones en el palacio y casas. Eidrien había salido para el hospital, preocupado porque Kay y Valeria aún no volvían a esas horas. Zéphyrin decidió no ir, aunque quería, después de la tarde no quería parecer como que estaba persiguiéndolo o que él seguía teniendo ese poder sobre ella. Había decidido guardar sus sentimientos para así tener el control y no salir lastimada una vez más, aunque se le estaba haciendo difícil.

    Suspiró y tomó el camisón que Esther y Shaedi le habían hecho. Lo observó con duda durante un largo rato, mientras lo tenía extendido sobre la cama. Se preguntaba si era buena idea usarlo esa noche. ¿Sería capaz de asumir las consecuencias? Pasó saliva y se abrazó a sí misma algo nerviosa. Había oído muchas cosas malas respecto a " eso que se hacía después de casarse", era un tema algo tabú en Aés Sidhe y muy pocas dracfeus se atrevían a contar sus experiencias. A pesar de su aparente inocencia, ella siempre sintió curiosidad por ese tipo de cosas, suponía que todo se debía al hecho de saber que le eran prohibidas. Y de nada le habían servido sus averiguaciones, la poca información que consiguió en sus años de vida fue errónea o quizá no, solo que estaba basada en las experiencias de dracfeus. Según las descripciones gráficas de Shaedi, nada tenía que ver con lo que había averiguado o se había imaginado.

    Cuando Shaedi le pidió que le explicase qué sabía ella, con muy poca convicción, le explicó y la pobre quedó espantada. "Eso no es", dijo muy tranquila, por lo cual no se sintió avergonzada ante su falta de conocimiento. Le explicó a detalle la situación, le dijo que con cada especie era diferente, que entre especies distintas las experiencias podían ser muy buenas o muy malas, que todo era dependiendo de cómo lo supieran llevar y sobre todo, la comunicación. "La comunicación es primordial, si no te gusta algo, dilo, si te gusta, también, si quieres hacer algo nuevo, háblalo. Si tienes tal confianza para desnudar tu cuerpo, es porque debes tener la misma para decir lo que piensas y sientes al respecto sin vergüenza". Había entendido, pero aún así se preguntaba cómo sería Eidrien, ¿sería como los de su especie o por ser mitad dracae y ángel negro habría diferencias?

    Negó con la cabeza para espantar sus pensamientos, quizá ni siquiera pasase nada, quizá él ni la miraría y quizá no volvería siquiera a dormir. Había dicho que lo haría, que estaría de vuelta rápido pero no sabía si creerle, no sería la primera vez que la dejaría toda la noche sola y sin explicación alguna.

    Se levantó de la cama, con el camisón en su mano y salió para tomar su baño de fuego. Se lo puso antes de que Bargdy la bañase, quería ver si de veras conseguía que no se quemara con el fuego. Notó que le quedaba perfecto de talla, tal como todo lo que Esther le había hecho. Le indicó al grifo que hiciera su trabajo. El fuego la rodeó y toda su piel comenzó a agrietarse, absorbiendo las llamas que la fortalecían. Su cabello se tornó color lava y así mismo su camisón, el cual volvió a ser negro luego de unos segundos de acabar el fuego.

    Zéphyrin sonrió y jugó un rato con Bargdy, quien se había vuelto muy apegado a ella durante todo ese tiempo. Volvió casi a las dos de la mañana, y estaba tan entretenida que ni siquiera notó que Eidrien salía de la ducha justo en ese instante. Ambos se detuvieron al percatarse el uno del otro y ella sintió sus ojos recorrer su cuerpo, llevaba la bata para cubrirse pero estaba abierta delante, por lo que le estaba dando una visión demasiado tentadora. Notó como sus ojos cambiaban a violeta casi al instante, ya había notado que lo hacía muy seguido cuando estaban juntos y tenía algo de intriga al respecto, pero no se atrevía a mencionarlo por miedo a su reacción.

    —Estás... —«Jodidamente caliente», gritó su cerebro pero no se atrevió a dercirlo—. Hermosa.

    —Gr-gracias —dijo nerviosa y siguió su camino hasta el clóset, para guardar la ropa que había estado usando antes.