Capítulo 20: Adicción

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19 de abril del 2019

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19 de abril del 2019

•Ian•

Toda esta semana tanto como mi madre y Richard han estado muy ocupados. Mamá me había dejado a cargo de James y Will, mientras que ella viajaba por asuntos del trabajo y poder buscar niños o mujeres que requieran ayuda. Como no teníamos nada por hacer, decidimos salir e ir al circo y distraernos un rato, pero con la actitud de James, fue algo incómodo e imposible disfrutar del paseó.

—¿Por qué tenemos que ir al circo? —protesta con amargura James.

—Porque Will quiere ir —responde Ethan con gentileza —, y yo también.

—Pero no me gusta, es aburrido y maltratan a los animales —expresa con horror.

—Ya había pensado en eso, ¿Me crees tan torpe para llevar a los hermanos de mi novio a un lugar así? —pregunta ofendido —. Solo presentan el show personas, no necesitan animales para hacer un acto. No tienes por qué preocuparte, James —aclara sonriéndole con amabilidad.

—Bien —suspira con pesadez —. Pero si sale cualquier animal, me largo y los dejo aquí —amenaza con seguridad.

—Nadie se irá, llegamos juntos y nos iremos juntos. ¿Okey, James?

—¿Mamá no se había viajado? —pregunta con amargura, yo lo mire ofendido, James cambio su gesto a una ligera sonrisa llena de burla en aquel rostro.

—Quiero un algodón de azúcar —revela Will con inocencia y jalando el brazo de Ethan tratando de llamar su atención y señalando el puesto con impaciencia, él le sonrió.

—¡Por supuesto! James, si cambias de opinión, podemos ir al zoológico. Venden unas palomitas muy ricas.

—Ni loco, ese lugar me da nostalgia. Ver a los pobres animales encerrados es... Muy depresivo —describe cruzándose de brazos.

—De acuerdo, ¿Quieres un algodón de azúcar, James?

—No, prefiero un refresco —revela sin intenciones de decir algo más, Ethan asintió, para después mirarme a mí.

—¿Y tú Ian? ¿Quieres algo?

—Estoy bien, gracias.

—De acuerdo, llevaré a Will por su algodón de azúcar. No tardo —informa tomando al pequeño en sus brazos, asentí mientras lo miraba alejarse.

—¿Aún no sabes nada de ella? —pregunta James con curiosidad.

—No, aún no se nada —respondo mirando con discreción el lugar en donde Ethan se marchó.

—¿En serio la sigues buscando? O ¿Solo le dices mamá que lo haces? —menciona mirándome interrogante.

—¿A qué se debe la pregunta James? —pregunto incrédulo.

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