Donde Wonwoo reúne a sus tres ex novios para una misión sumamente importante... ¡Ser sus "caballeros de honor" en su boda!
El problema empieza con que los tres chicos, no son realmente amigos y de hecho se odian un poco porque claro, nadie quiere se...
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«Que habla de cómo ocurrió la propuesta de matrimonio»
—No sé cómo me convenciste de hacer esto– Minghao soltó un lamento y se cubrió el cabello que ahora le caía un poco mas largo de lo usual.
—Te queda muy bien, deberías estarme agradeciendo– Seokmin se colocó a su lado, sonriendo.
Minghao se vio al espejo de nuevo y contuvo un jadeo. Ahora tenía el cabello un poco más largo de lo usual, sobre todo la parte de la nuca y estaba pelinegro. No podía creer que consideró sensata la idea de dejar que Seokmin decidiera su nuevo estilo. Ahora parecía un poco maleante, pero según palabras de Seokmin, se veía sexy.
—Tú hazme caso, a Wen le encantará. Yo siempre tengo las mejores ideas– Seokmin estaba muy orgulloso de si mismo. —Debo irme, Joshua me invitó a salir y ya voy tarde como por veinte minutos– mencionó mientras veía el reloj en la pared.
—Creí que el único impuntual era Wonwoo.
—Hablando de Wonwoo– Seokmin sonrió con malicia —hace poco le confesé que Mingyu y tú habían sido novios en el pasado.
Minghao casi se va de espaldas.
—¡¿Por qué hiciste eso?!
—Wonwoo ya lo sabía. Dice que Mingyu se lo dijo luego de que terminaron la primera vez y se reconciliaron. Hicieron la promesa de que no habría secretos entre ellos. ¿Te das cuenta de lo que significa? No habríamos podido arruinar la boda de todos modos porque la noticia no habría impactado a Wonwoo. Me siento estafado.
Minghao no sabía si reír o golpear a Seokmin así que hizo ambos.
—¿Y eso porqué fue?– preguntó indignado.
—Eso fue por haberme convencido de arruinar mi cabello de esta manera y esto– le dio otro golpe en la nuca —es por haberle dicho algo del pasado a Wonwoo luego de que lleva casi cuatro años de casado.
Seokmin rodó los ojos e ignoró todo antes de despedirse pues tenía una cita a la que llegaba tarde.
Minghao se vio de nuevo al espejo considerando la idea de usar una peluca, Jun llegaría en cualquier momento y en verdad le avergonzaba que lo viera de esa manera. Ya no era tan joven como para seguir experimentado cortes peculiares.
Decidió arreglarse un poco antes de recibir a Jun. Se dio un baño y se vistió con algo tentador, un ajustado short que le hacía resaltar el trasero y un crop top color azul. Se detuvo un momento y soltó un grito.
—¡BongBong, estoy gordo!– dijo, sujetándose la barriga blandita —¿cómo pasó esto?
Por supuesto que sabía cómo había pasado. Los últimos meses Jun había aprendido a cocinar una cantidad obscena de platillos deliciosos. Ahora cada vez que se veían en lugar de salir a comer fuera se quedaban en casa y Jun cocinaba como si veinte personas fueran a comer. Minghao siempre fue una persona de gran apetito pero solía cuidar su figura todo el tiempo hasta que su novio decidió que no era necesario y le metió mil comidas. Claro que Minghao no se quejaba o al menos no hasta ahora.
