Maddison y Matías eran dos niños que habían hecho un clip desde que sus ojos se encontraron. Era lo que se conocía como «alma gemela en amigos», pero como todo lo incierto sus mundos no eran para nada parecidos. Él sufría con constantes cosas que no eran permitidas para un niño de su edad, y ella vivía en un mundo de princesitas y hadas en el que la maldad no existía.
Los dos eran dos polos opuestos, mientras que ella era el agua más refrescante en verano, él era el fuego que consumía todo a su paso.
Todo el que los veía notaba el fuerte lazo que los tenia unidos, eran uno, y se pertenecían.
Un día por razones del destino son separados y sus almas llorosas piden a gritos quedarse cerca. Aquel era el comienzo, y el principio de todo aquello que sin duda alguna los cambió.
Con un beso, un simple roce, y miles de palabras jamás dichas fueron despedidos y es que aunque el mundo trate de llevarlos por caminos diferentes, su alma y espíritu estaban lo suficientemente unidos como para poder estar separados por mucho tiempo sin necesitarse.
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Novela escrita con escenas totalmente explicitas, no promuevo y comparto lo que se comparta aquí.
La obra está registra por derecho de autor y no doy autorización de adaptación.
En fin, disfruten de está aventura tanto como yo.
Nos leemos pronto,
Nikol.
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