CAPITULO 277 CONTACTO ENTRE LOS DOS GRUPOS

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PERSPECTIVA: Tercera Persona


Una joven de túnica, piel blanca y larga caballera naranja hace acto de presencia, en sus manos empuñaba una escopeta, un arma desconocida para los soldados pesados a su alrededor, incluso para la propia Namida, pero Crok reconocía a la perfección aquella pieza que sostenía la joven consigo.


—«Una SPAS-12... no hay duda de que es una exacta» -El hombre amazona concluye —«¿Entonces existen otros capaces de fabricar armas de fuego?, pero el aspecto puramente metálico de aquella arma... pone en evidencia que parece ser una creación de Rozuel».


En el hombro de la muchacha de cabellera naranja aterriza una criatura con aspecto de ardilla de ojos azules, pelaje rojizo y una cola cuya punta poseía una flama, esta emitía un aura en forma de diminutas chispas, aquel ser había sido el responsable de haber invocado aquel ataque de llamas, la criatura desaparece dejando en claro su identidad como espírano.


La muchacha era consciente de que estaba rodeado de extraños y más aún potenciales hostiles, pero le llamaba fuertemente la atención los dos individuos que se encontraban en el pasillo del interior del palacio, más concretamente las armas que Crok y Namida empuñaban en sus manos, no podía evitar pensar de quien sería el responsable de crearlas.


La muchacha de cabellera naranja quería respuestas, sabía que aquellos dos tenían información esencial que precisaba, quería hablar con ellos, pero el escuadrón de soldados de armadura pesada a su alrededor, no le veían con buenos ojos, luego de haberse recuperado de aquel ataque ígneo, estos centraron su atención en ella, pues la veían como una amenaza considerable luego de haber presenciado aquella magia de fuego.


No tardaron en rodearla, tomar posiciones y empuñar su lanza principal apuntando hacia ella, cargarían contra la muchacha con la habilidad mágica de su lanza, la razón de preferir una ofensiva a distancia era por el fuego que aquella fémina era capaz de desatar, temían que acercarse a ella sería un enorme riesgo para ser envuelto en llamas nuevamente.


La chica de túnica suspira, su arma ya no tenía casi mucha munición, arriesgarse a combatir contra aquellos soldados que le rodeaban era más que problemático, más considerando que se dejó rodear, antes de que alguno de sus oponentes hiciera el primero movimiento, ella levanto el brazo y señalo hacia una dirección, más concretamente hacia la gran puerta abierta.


Algunos voltearon la mirada hacia aquella dirección y reaccionaron con un fuerte exclamar de sorpresa que llamo la atención del resto para que voltearan también, entonces todos los soldados pesados denotaron una perplejidad como ninguna. La razón detrás de ello era por la llegada de un carruaje de aspecto lujoso de color plateado y dorado que era impulsado por cuatro caballos blancos de bello pelaje albino.


El carruaje se detiene, y al abrirse la puerta, tres individuos se bajan de su interior, el primero era una semihumana con la apariencia de un animal antropomórfico de pelaje blanco, cuyo hocico se asemejaba al de un felino acompañada de un par de orejas largas similar a las de un conejo sobre una cabellera albina larga, bajo sus ojos resaltaba una corta línea roja y poseía además una larga cola. Aquella semihumana tenía una estatura estimada de 185 centímetros, tenía puesto una armadura de cuero ligera tachonada del torso hasta la cintura, de tonificada constitución tanto en torso, como extremidades superiores e inferiores, aquella era una Sargaria.

Metalord Revolution [Capitulo 201 en adelante]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora