¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Si alguien se mueve entonces sáquenle el otro ojo al chico y luego seguiré. Pueden respirar, parpadear y llorar.— cerré mis ojos con fuerza.—Si, todos van a llorar.
Apreté mis puños, de mis ojos caían lagrimas mientras estaban cerrados, escuche como levantó el bate y luego el golpe.
El grito y llanto de todos y sangre sobre mi cuerpo.
Pero no sentí dolor.
Las gotas de sangre que habían caído en mi rostro comenzaban a desplazarse en mi mejilla, dando un pequeño cosquilleo en esta, solté mis puños, abrí mis ojos.
Abrí mis ojos. Y entonces lo vi. Vi a Abraham arrodillado a mi lado, con sangre en su cabeza y cayendo por su rostro, el bate de Negan lleno de sangre y el pelirrojo apenas manteniéndose arrodillado.
Negan dijo unas palabras, pero no las oí, estaba muy concentrada en Abraham, no puedo creerlo.
Volvió a golpearlo, y otra vez, y otra vez.
Mató a Abraham.
Entonces reaccione, la rabia invadió mi cuerpo, quería golpear a Negan, quería matarlo.
Él se acercó a mi y puse el bate en mi rostro.
—¿Lo ves? Cambie de opinión en el último segundo, o más bien Lucille lo hizo.
—Vete al diablo.— se agachó a mi altura.
—Sabes, no es forma de hablarte a tu jefe.— el miró a Rosita.—Por la forma en que ella lloraba cuando casi te golpeó, puedo deducir que es tu novia.
—No te atrevas.— le advertí.
Él sonrió y se acercó a Rosita, le puso el bate cerca del rostro.—Ese chico, salvo a tu novia.
—No es mi novia.— dije mas alto esta vez.
—No me mientas.— me miro por unos segundos y su vista en ella otra vez.—Cariño, tienes que ver esto. Tienen que saber esto, el nunca fue tan pelirrojo como ahora, puso el pecho ¡o mejor aun dicho, la cabeza por ustedes! Así que, levanta la vista.— se quedó en silencio unos segundos.—¡Levanta la vista!— le gritó.
Daryl se puso de pie y le dio un puñetazo pero los salvadores no tardaron en botarlo al suelo y golpearlo. Hasta que Negan ordenó que lo dejen donde estaba.
—Eso, eso fue un gran error, ni una pizca de esas idioteces está permitida aquí.
Un chico rubio se acercó con la ballesta de Daryl.—¿quieres que lo haga? Lo haré.
—No, no harás nada, sin esforzarte antes. Y además, así no es como funciona, ya se los dije, la primera era gratis. Luego que dije, ¡que iba a destrozar al que lo intentara. Sin excepción. No se con que clase de mentirosos han estado lidiando hasta ahora pero soy un hombre de palabra, las primeras impresiones son importantes. Necesito que me conozcan. Así que.— tomó su bate con las dos manos.—Va otro.
