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-¡No es justo!

-Lo que dijo Maguna, ¿por qué tu si pasaras el fin de semana con papá y nosotros no?

Steve quería reír, se abstuvo a solo regalar una sonrisa tímida a los niños.

-Su papá deberá quedarse en cama, tiene mucha fiebre

Los gemelos jadearon asustados

-¿Está enfermo?

-¿Se va a morir?

Iba negar rápidamente lo dicho por Peter pero Maguna fue más rápida y golpeó a su hermano

-¡No digas tonterías! papá no va a morir- entonces miró a Steve para que diera fe a sus palabras- ¿verdad?

Steve dejó un beso en la cabecita de Peter justo donde su hermana lo había golpeado.

-No, su papi estará bien porque yo lo voy a cuidar, sus tíos vendrán a cuidarlos- los menores negaron rápidamente pensando en Arno- ¿no quieren que los cuide tía Pepper y tío Bucky?

-¡Si, ellos si!

-Perfecto, están en la sala esperándolos, yo iré con su papá, por favor sean buenos

Tras un beso en cada mejilla, los cachorros bajaron corriendo las escaleras mientras Steve caminaba a prisa para adentrarse en la habitación de Anthony.

Se detuvo frente a esta, podía inhalar el delicioso aroma del alfa en celo dentro de la alcoba, sintió como su miembro despertaba y su lobo aullar listo para satisfacer a su alfa.

-No seas cobarde, no seas cobarde

Tras un suspiro ingresó la clave para acceder a la habitación, en cuanto cruzó el umbral, Anthony posó sus ojos sobre él.

El alfa estaba completamente desnudo y con una deliciosa erección a la vista.

Steve pudo detallar el cuerpo de su alfa, el abdomen marcado y esos enormes brazos, vió una sonrisa burlona en los labios de Tony; seguía consiente.

-¿Estás seguro de esto?- Stark trataba por todos los medios de mantener su autocontrol, pero era muy difícil con Rogers sentándose sobre él y comenzando a mover sus caderas

-¿No quieres?- preguntó parando todo movimiento y dejando ver un ápice de miedo en su azulada mirada

Con un rápido movimiento, Tony lo dejó bajo de si hundiendo su rostro en el cuello del Omega

-Estoy muriendo por tenerte gimiendo mi nombre- el rubio podía sentir la necesitada erección de Tony restregandose contra su pierna- por marcarte y llenarte hasta que lleves a mis cachorros- sabía que ese ya era el lobo de Tony y no pudo estar más satisfecho, el hombre y el animal lo aceptaban como su pareja, como su luna.

-¿Entonces que esperas?

Las manos del alfa fueron a dar al trasero del Omega estrujando la zona a su antojo

-Vas a ser mío, beloved

Gold RushDonde viven las historias. Descúbrelo ahora