Gold Rush

20

Los pequeños lloraban aferrándose a Tony, su llanto menguaba a medida que su padre alfa liberaba feromonas que los hacían sentir protegidos

Después de que Maguna supiera la verdad, corrió a preguntarle a su padre y en el proceso, Peter lo escuchó

-Escuchen, son mis hijos- los gemelos estaban sentados sobre las piernas de su padre, uno en cada una- porque yo los ví nacer, porque los cuidé cuando estaban enfermos, porque les enseñé a hablar y les he leído demasiados cuentos, soy su papá, porque los amo más que a mi vida

Peter y Morgan volvieron a aferrarse al torso de su padre, compartieron miradas y sabían que nada cambiaría, pero aún así, debían sacar esa duda que los estaba consumiendo

-¿Y si nuestro verdadero papá quiere llevarnos?

Tony tuvo que tragarse un gruñido para no asustar a sus bebés

-Yo soy su verdadero papá, nadie va a llevárselos de mi lado, lo prometo

La voz solemne de Anthony en compañía de su aroma, hizo que los cachorros creyeran en su palabra no obstante, sus pequeños cuerpos seguían temblando, creían en su papá pero era como aquella vez que cayeron de la casa del árbol, no volvieron a subir por días, sabían que no volverían a caer pero el miedo seguía ahí, sabían que su papá jamás los abandonaría pero siempre había una posibilidad.

-Son nuestros niños, ¿creen que dejaremos que se los lleven?

La voz de su tía Pepper les hizo negar suavemente

-Les prometí que nadie volvería a lastimarlos, yo siempre cumplo mis promesas

Dejaron que Steve suavemente les quitara las lágrimas que nublaban su vista y fue entonces cuando los menores pudieron apreciar a su familia.

Ya no eran solo ellos, ahí estaba su abuelo, sus tíos y sus padres, por fin tenían una familia que los quiera y protegía, al fin tenían una manada que pelearía por ellos.

-Papá- Tony miró a su princesa- no te vuelvas a ir

Anthony los apretó más contra si, se sentía tan culpable, una basura por haber abandonado a sus hijos y sumirse en su depresión

-Te lo prometo- miro a Peter- se los prometo, siempre tendrán a su padre cuando lo necesiten

Los cachorros comenzaron a reír a causa de las cosquillas que su padre les hacía.

-¿Arruinamos la sorpresa de Steve?-preguntó el pequeño castaño teniendo que su esfuerzo se haya ido a la basura

-No, solo la retrasaron- dijo Bucky con intensión de molestar a los niños

-¿Por qué no van a matar al mapache y después vamos con la sorpresa?

Los cachorros brincaron como si tuvieran resortes directo a atacar a su tío, era gracioso ver cómo Barnes corría de dos pequeños.

Al final solo escucharon los gritos del alfa y las risas de los niños.

-¿Tony?- el mencionado miró a su padre quien lo esperaba con los brazos extendidos

Anthony era el alfa entre alfas, los omegas y betas e incluso algunos alfas morían por una noche con él, todos lo veían con admiración, algunos cuantos con miedo, pero ahí, justo en ese momento en que correspondió al abrazo de su padre, se veía solo como un cachorro asustado.

La escena derritió el corazón de Steve, sabía que se había enamorado de la persona correcta.

-Steve- la voz de Pepper lo sacó de sus pensamientos

-¿Si?

-El celo de Tony será este fin de semana, tenía preparado todo para ese día pero no sé si tú...

La mirada pícara de la mujer hizo que a Rogers se le subieran los colores, sus manos temblaban sin embargo...

-Yo atenderé a mi alfa