Gold Rush

Extra 1

-¡Me pateo!- Peter estaba al borde del llanto -¿no le caigo bien?

Steve rió negando rápidamente y apresurandose a besar la tierna carita del menor

-Esa es su forma de decir que están contentos, ¿cómo no les vas a caer bien si eres su hermano mayor?

Esta vez el castaño asintió emocionado acercándose otra vez a la pancita de Steve que parecía estallaría en cualquier momento.

-¡Yo también quiero caricias de pops!- Peter se aferró al rubio en tanto Maguna luchaba por bajar de los brazos de su padre alfa solo para molestar a su gemelo.

-Nada de eso mocosos, él es mío- Tony dejó a Morgan en el sillón al otro lado de la estancia dándole tiempo para llegar antes con Steve

El rubio solo rió al borde del llanto, las hormonas le estaban pasando una mala jugada, eso y sumado el que los castaños siempre peleaban por su atención.

Cuando les devolvieron a los cachorros, les explicaron el porque de todo, los niños no son tontos y pueden entende cualquier cosa; también les hablaron de su nuevo hermanito, mejor dicho, hermanitos, al parecer estaban esperando a otros gemelos.

-¡Papá, no!

-¡Tú lo tienes toda la noche y cuando vamos a la escuela!

El castaño mayor se aferró a su omega y el rubio solo pudo deleitarse con el aroma protector de su alfa

-¿Y eso qué? yo lo conocí primero

-Tony, deja de pelear con los niños

-Pero ellos empiezan

-¡Pops, dile algo!

-Está bien, todos abracenme, lo necesito

El Omega no tuvo que pedirlo dos veces, sus tres castaños lo abrazaron como si la vida se les fuera en ello.

Pasaron por momentos difíciles pero habían logrado superar cualquier adversidad, eso no significa que no tendrían pequeñas piedras en el camino, pero Steve sabía que su manada siempre estaría para apoyarlo y él a ellos.

El miedo que sintió debido a lo que Arno vivió con los Stark se había ido, no culpaba a Howard ni lo juzgaba, pero se dijo que él sería mejor y lo logró. Amaba a Peter y Morgan, eran sus cachorros, su lobo los reconocía como suyos.

-¿Ya decidieron el nombre?- preguntó Peter con la orejita pegada a la barriga del rubio- porque estaba pensando que Goku sería un gran hombre

-¡Y el otro puede llamarse Barbie!

-¿De qué están hablando?- Tony se ganó una mirada molesta de sus niños, para ellos no era un juego

-¿Dime quién tiene más profesiones que Barbie?, nadie ¿tu has ido al espacio? ¿fuiste estrella de rock?, no, Barbie te gana- defendió la castaña dejando con la boca abierta a su padre

-Goku es Goku, viejo

-¿Escuchaste Stiff?, tienes que decirles algo

El rubio estaba por decir algo pero cuando abrió la boca solo salió un grito lleno de dolor

-¡Creo que Harley y Sarah ya vienen!

-¿Cómo la moto de papá?- Peter se ganó un golpe de su gemela- ¿qué?

-¿No escuchaste menso, ya van a nacer?

Los gemelos se vieron entre sí procesando la información y finalmente gritar llenos de pánico contagiando a su padre que gritaba igual sin saber que hacer

-Viernes, ¿puedes llamar a Pepper?

-Ya lo he hecho señor

Steve suspiró dejando que el dolor de la contracción pasara, tenía tiempo, solo esperaba que sus castaños no siguieran en shock