AYÚDAME (ShinBoru) (SasuNaru)

Lo Siento 🎭

El momento había llegado, Boruto lo sabía perfectamente. La situación se volvía insostenible con cada segundo que pasaba. Seguir ocultos de todos y de todo, a su vez tener que sobrevivir viviendo de nada en concreto.

Aquel tipo de vida era su realidad propia, así se hubo criado y estaba acostumbrado. Podía hacerlo, era conciente de ello. Además matar al rey del reino del viento era su objetivo. Matarlo a él y a todos los hechiceros reales.

Pero no podía seguir arrastrando a su papá, a Sasuke y a su hermano Mitsuki. Ellos no estaban acostumbrados a ese tipo de vida ni tampoco se merecían vivir así.

Luego pensó en Shinki y supo que en realidad era un egoísta, ya que tampoco se merecía vivir así siendo el principe del reino del fuego. Pero su egoísmo lo llevaba a arrastrarlo consigo hacia la muerte.

Boruto cerró los ojos con fuerza mientras temblaba. Es que no soportaba la sola idea de tener que separarse de Shinki. Deseaba estar a su lado aunque eso signifique la perdición del príncipe mismo.

- Después de todo soy un demonio ¿cierto? - susurró miramdo la nada con sombría expresión.

Había podido compartir con su papá lindos momentos, lo pudo conocer y disfrutar un poco aunque más no sea.

Suspiró apesadumbrado, sabiendo que ninguno le perdonaría lo que estaba a punto de hacer. Pero era por el bien de los tres.

Aprovechó que estaban distraídos para atacarlos con el increíble poder de Shukaku para inmovilizarlos, mientras que con el poder del Nibi abría el portal que los conduciría a casa a su papá, su hermano y a Sasuke.

Los amarró con la arena impidiendoles moverse a ninguno.
- ¡Hijo! ¡No lo hagas! - dijo Naruto desesperado.

- Papá, Mitsuki, Sasuke....es por su propio bien. Sé que me odiarán por ésto y lo acepto. Pero no puedo permitir que mueran conmigo. Ustedes deben vivir.

- ¡Permites que Shimki se quede a tu lado hermano! - rugió Mitsuki
- Lo amo hermano, se que es injusto y que debería dejarlo volver con ustedes al reino del fuego pero no lo haré. Después de todo solo soy un demonio que fue condenado a muerte ¿verdad?

Cuando el portal se abrió Boruto los arrojó rumbo a casa. Pero Naruto miró a su hijo y seriamente le dijo.

- Te equivocas si crees que ésta será la última vez que nos veremos hijo. Aquí quien no sabe nada eres tú. Yo te buscaré y regresaré a tí antes de que puedas acabar con el rey del viento.

- Solo olvidame papá y vive tu vida junto a la persona que amas y a tu otro hijo.
- Mitsuki - dijo Shinki - Disculpame con mi padre, por favor....amigo.
-¡Boruto! ¡Shinki! - gritó Mitsuki antes de desaparecer en el portal junto a Naruto y Sasuke.

Segundos luego todo estaba hecho. El portal se cerró, y tanto Shukaku como Matatabi volvían a dormirse en el interior del rubio, hasta la proxima vez que los necesite ambos.

Boruto lloraba a más no poder.
- Papá, Mitsuki, lo siento - luego miró a Shinki - Era lo correcto ¿verdad?

- Por supuesto ángel mío, por supuesto - el azabache lo abrazó con dulzura y el rubio lloró hasta quedar sin fuerzas en sus brazos.

- Te amo Shinki, te amo tanto que....que....
- Lo se mi vida, lo sé. Yo también te amo.

- Perdoname mi amor
- No existe otro sitio donde quiera estar en éstos momentos. Por lo tanto no pidas perdón.

Ambos se adentraron en la cabaña ya que la noche nacía y junto con ella el intenso frío. Dentro encendieron el fuego y prepararon la cena juntos.

Al día siguiente saldrían temprano rumbo a la fortaleza de los hechiceros reales. El plan era destruirla con todos ellos dentro. Así debilitarían el poder del rey.

Pero la voz del rey Gaara resonó en la mente de Boruto en ese instante. Shinki le habló ya que tocando a Boruto podía oír a su padre también.

Ambos jóvenes supieron que Naruto, Sasuke y Mitsuki habían llegado pero se.encontraban deprimidos y furiosos. Naruto empezaba a planear el siguiente paso que consistía en volver junto a su hijo lo más pronto posible.

Boruto suspiró apesadumbrado ya que su papá no lograba entenderlo.
- Volveré a tí padre, no desesperes.
- Shinki

- Perdón majestad - intervino Boruto - Me esforzaré por proteger a su hijo. Pero a partir de éste momento Shinki y yo necesitamos concentrarnos en lo que debemos hacer. Por lo tanto ya no podrá comunicarse con nosotros, pero sí podrá usar el poder de Shukaku con ese dije que le dí.

Inmediatamente cortó la comunicación. Shinki sabía que era lo mejor, ya que no podrían concentrarse en lo que debían hacer de la otra forma.

Sbinki sabía que Boruto necesitaba amor y consuelo. Por tal razón, luego de la cena lo amó en cuerpo y alma entregandose a él con cada fibra de su ser.

- Calma Boruto, yo estoy contigo además de Shukaku y el Nibi. Ninguno dejaremos que te maten ni pensamos morir.
-¿Tendremos éxito y volveremos a casa?
- Así es, además debes casarte conmigo.
- Será un honor para mí ser tu marido.

Ambos se fundieron en un solo y único ser, mientras fuera empezaba a llover.