¿Podrías Amarme?

VIII

No puedo recordar la última vez que hicimos esto

Mmm.. Daniel mantuvo los ojos cerrados, pero luego se retorció y se rio, sacando los brazos de donde descansaban detrás de su cabeza para poder abrazar a toro, Toro era un Border Collie de color negro con manchas blancas que pertenecía a Charles Leclerc y Charlotte Siné su esposa. Daniel estaba acostado de espaldas sobre la manta que Charlotte había traído y toro acababa de cambiar de posición para colocar sus patas delanteras y su cabeza sobre el estómago de Daniel.

Usualmente pasas los domingos en la cama, agregó Charles, reajustándose su gorra de McLaren negra, ¿Por qué preguntaste qué estábamos haciendo hoy?

bueno ya, ¿no puedes dejarlo disfrutar del sol? Preguntó Charlotte, usando su pie para empujar a Charles sin mirar, mientras continuaba leyendo su libro, Siempre tienes mil preguntas -dijo Charlotte

¿No crees que es extraño que esté aquí sin hacer nada los domingos? -pregunto nuevamente Charles-, y Daniel finalmente se rio. Bueno, duramos treinta minutos antes de que empezaras a psicoanalizarme, así que eso es bastante bueno, amigo -comentó- y luego se sentó y tiró a toro en su regazo con un gruñido, alborotando su pelaje con vigor.

Toro giró la cabeza y saltó directamente del regazo de Daniel para sentarse en la manta por sí mismo de nuevo, pero rodó sobre su costado con la esperanza de que le rascaran la barriga, lo que Charles concedió.

-Sácalo de su miseria-, sugirió Charlotte a Daniel.

¿Qué, decirle por qué estoy fuera? -Preguntó Daniel-. Porque hace buen tiempo, ¿no lo creen? y cuando le pregunté a Charles qué estaban haciendo ustedes dos, él me invitó aquí, así que aquí estoy; No estoy pidiendo una explicación lógica -dijo Charles- haciendo crujir los nudillos y luego arqueando un poco la espalda en su posición sentada, Su libro descansaba a un lado y un viejo recibo de una cafetería era usado como separador.

¿Alguna vez? Charlotte preguntó con cansancio y Charles levantó en silencio a toro, lo sentó sobre sus patas traseras y toro miró hacia Charlotte, con las patas levantadas en posición de ataque, "Muérdela", dijo Charles simplemente y toro no hizo nada, como se esperaba.

Lo que realmente está tratando de preguntarte es: ¿Cómo está Phani?" Dijo Charlotte, quitándose la curita imaginaria mientras Charles dejaba a toro en el suelo.

Phani está bien y no es asunto de ustedes, respondió Daniel, tratando de no pensar en el viernes por la noche, cuando Phani le había pedido a Daniel que usara un vibrador en ella para estimularla previamente, el resultado había sido... Daniel se aclaró la garganta para sacudir las imágenes mentales, porque verla así había sido una experiencia fascinante sin embargo, fue después, cuando ella se acurrucó en los brazos de él y le preguntó si tenía chocolate, fue cuando Daniel sintió la primera sensación fugaz de profunda gratitud.

Su idea funcionó respecto a los contratos de los chicos, señaló Charlotte, y Charles se rio entre dientes -sabiendo que su chica no quería incomodar a Daniel-

Creó que como lo había planteado antes Daniel en la junta el hecho de haber firmado otros años más con Lando Norris y también tener a Oscar Piastri -dijo Charles- ¿no creen que la gente va a comenzar a pensar que tal vez, no lo sé pero que Oscar pasara a ser el reemplazo de Lando cuando este deje el equipo? -pregunto Charlotte un poco seria

nosotros ya conocemos esas historias y no es como que para ellos también pasan desapercibidas, digo saben cómo funciona este deporte pero Lando me cae muy bien y es buen corredor... Lando siempre ha tenido un gran desempeño, todo pasamos por lo mismo, Charles y yo conocemos perfectamente la adrenalina que se forma al subirte al monoplaza y más cuando estas sobre el circuito, pero el tiempo pasa, te vas haciendo viejo y con los años llegan pilotos más jóvenes y con más energía y simplemente dejan de apostar por ti -dijo en un suspiro Daniel-