MI MUJER - SEVERUS SNAPE

FAMILY

Capítulo XIV

|FAMILIA|

- ¿Cuánto tiempo durara el veritaserum? - pregunte.

- Por un par de días, en general es un ciclo lunar - contestó.

- Eres un estúpido, Severus - lo regañe, se supone que debe tener cuidado y no arriesgarse así, ¿Es que no piensa, que cualquiera se puede aprovechar del él?

- Era necesario, no me creerías nada y la verdad ya estaba harto que dudaras de mí, mujer eres mi esposa, la madre de mis hijos y debes aprender a confiar en mí - fue lo único que respondió - Además ya te eh dicho que eres igual de terca como una mula, así que esta fue la única opción que encontré - con uno de los bebés en brazos dijo - Tenemos que nombrarlos.

- Ah, sí claro cámbiame el tema, que al cabo que, verdad - conteste pues ¿Quién se cree?

- No es eso, mujer siempre crees que estoy en tu contra - se queja él - Yo solo quiero que nos enfoquemos en lo que importa y eso son los niños, que para variar son tres - sonríe con esto último, viendo a los niños, que saciados habían abandonado mis pechos, al carajo creo que lo mejor será sacarme la leche y dárselas en mamilas, porque al paso que van me dejaran sin bubis.

- Bueno, ¿Qué nombres has pensado? - pregunté, ya que el sugirió que los nombráramos.

- No eh pensado en ello, siempre supe que sería decisión tuya - dijo él, tomando a otro de los bebés que tenía en mis manos, para sostenerlo él.

- Bueno pero primero debemos saber quien nació primero - dije viéndolos, porque los tres eran idénticos ¿Cómo los voy a distinguir?

- Solo tienes que ver sus pies, mira - me señalo el pie del bebé que aún tenía en mis brazos - Él es el segundo - y efectivamente en su pequeño pie tenía una pulsera con el numero 2 color plata.

- ¿Es enserió? - pregunte con diversión al ver la serpiente enredada en el número.

- ¿Qué? - pregunto haciéndose el tonto.

- No eres tonto, Cariño, bueno eso supongo - dije.

- Muy graciosa - se quejó - Mejor dime los nombres, tenemos que registrarlos.

- El mayor se llamará como tú, será Junior - dije señalando al pequeño que estaba en su brazo derecho - Y este pequeñín se llamará Sebastián y el más pequeño Sebastiaan - dije feliz, porque era lo que mejor se me había ocurrido.

- Creo que confundiremos a 2 y 3 - dijo Severus.

- ¡Oye! - me queje haciendo reír a los bebés.

- Mira, ya te saben que eres gruñona - se ríe Severus, haciendo reír a los pequeños.

- ¡Por Merlín, serán igual que tú! - me queje.

- Da gracias que físicamente son como tú, no me imaginaría que hubieran heredado mi nariz, bueno en general mis rasgos físicos.

- ¿Qué tonterías dices? - pregunte con sarcasmo - Eres guapo, Severus no lo digo porque eres mi esposo, sino porque de verdad eres guapo, te aseguro que muchas alumnas están enamoradas de ti - dije viéndolo.

- Esas son tonterías.

- Eso es lo que tú piensas - me quejo - Porque de verdad eres guapo.