06

856 63 4
                                    

POV Camila

La cabaña se sentía húmeda, abandonada pero la presencia de ella junto a mi era de gran ayuda.

-Encontré algo de ropa- anuncio entregando me una camisa de hombre color negra.

-Gracias- me limite a decir para luego ir hacia otra de las habitaciones de la cabaña para así poder cambiarme.

Mientras ella investigaba la cabaña mas a fondo yo me cambiaba, había encontrado una camisa lo suficientemente larga como para tapar todo mi cuerpo.

La lluvia golpeaba el techo de aquella cabaña abandonada, los truenos resonaban demasiado fuerte haciendo que mi miedo aumentara aun mas.

-Te encuentras bien?- pregunto.

-Mas o menos- respondí mientras frotaba mi cuerpo con mis brazos.

-Busque algunas ramas secas y podemos prenderlas para hacer una fogata- sugirió ella dejando las ramas en el suelo.

-Puedo ayudarte- sugerí acercándome a ella.

-Puedo hacerlo sola, ve y espera que pueda prender esto- contesto alejándome de el.

Prendió la fogata después de varios intentos para luego ponernos frente a ella.

Las llamas calentaban a penas mi cuerpo pero al menos teníamos algo calentito que nos podía servir hasta que la lluvia pare.

-Puedo hacerte una pregunta?- pregunte deshaciendo el silencio.

-Claro- respondió ella con ambas manos encima de la fogata.

-En donde estamos? Como vamos hacer para volver?- pregunte con miedo a su respuesta.

-No se donde estamos y mañana caminaremos hasta encontrar algún pueblo o algo para preguntar como llegar a New York- contesto con una expresión de seriedad en su rostro.

-Parece buena idea- respondí clavando mi mirada al fuego.

-Ya que ninguna puede decir su nombre, podríamos ponernos apodos- sugiero rompiendo el incomodo y horrible silencio.

-Que clase de apodo?

-Que tal si ponemos colores como apodos?- pregunto  ella mirándome divertido.

-Black- nombro mirándola fijamente.

-Por que Black?

-Porque eres misteriosa, solitaria y de seguro tienes un pasado oscuro- explique intentando esconder mis nervios.

-Me gusta- dijo con una sonrisa.

Era la primera vez que la veía sonreír de esa manera y verla sonreír me parecía la cosa mas maravillosa del mundo.

-White será el tuyo- anuncio muy segura de sus palabras.

-Y por que?

-Por que eres angelical, llevas luz a donde vayas y tienes una personalidad demasiado alegre.

-Black y White- nombre amando ambos apodos.

-Somos lo opuesto- comento con una sonrisa en sus labios.

-Dicen que los opuestos se atraen- me atreví a decir.

-La lluvia ha cesado un poco- anuncio cambiando de tema.

-Mañana por la mañana podremos irnos de aquí- comente tapándome con una manta que Black había encontrado.

-Que descanses White - hablo recostando se en el suelo.

El silencio reinaba en aquel lugar húmedo y abandonado, pero de repente un fuerte trueno sonó asustándome lo suficiente como para gritar del miedo.

Black despertó asustada por mi grito.

Celda 593Donde viven las historias. Descúbrelo ahora