Narra Ámbar
Las cadenas queman mis muñecas.
No otra vez...Abro mis ojos con dificultad observando la habitación. Hecho mi cabeza hacia atrás respiración hondo. Mi cabeza palpita y me duele la garganta.
No se cuando tiempo a pasado solo se que no siento mis brazos. La habitación se ilumina y no me inmuto en mirar. Agarra una silla y se sienta delante de mi.
— Buenas noches— dice— Durmió más de 12 horas.
No respondo.
Lo último que quiero es escucharlo. Estoy tan llena de frustración que me dan ganas de llorar y no puedo llorar frente a él.
Cierro los ojos respirando hondo.
— No me llores, nena. Sabias en lo que te metías
Lo ignoro mantenido mis ojos cerrados. Necesito pensar en algo.
— No me gusta tu actitud— habla.
— ¿Qué actitud?— abro los ojos mirándolo confundida.
Se levanta.
— Me estás ignorando— Se acerca por completo
— Ojalá , pero no tengo fuerzas ni para ignorarte— Me apoyo de mi brazo y lo miro— si estas buscando que discuta contigo, este no es el momento.
Cierro mis ojos y el gruñe.
— Tus mejillas están roja — Toca mi mejilla derecha— estas ardiendo, joder... ahora falta que estés enferma, maldición...
¿Por qué grita?
— ¿quieres bajar la voz?— apenas puedo hablar.
— No que te estoy gritando — suelta mis manos y me carga en brazos.
Pierdo la noción del tiempo.
Narra Wolf
Tuve que llamar a mi médico personal, Ámbar no se puede morir, por qué muerta no me sirve.
— Reaccionó mal al cloroformo, deberías dejar de inyectarle o la terminarás matando.
— ¿Entonces que hago? Es la única manera de mantenerla tranquila, por que si se escapa, me jode. —Fumo un cigarrillo— La tipa sabe muchas cosas.
— Enamórala... Las de la DEA son difíciles, pero no imposibles.
— Nah, es una terca. Lo único que tiene metido en la cabeza es encerrarme, por que según ella, es donde merezco estar.— doy una carcajada
Ámbar comienza a moverse.
— Intentar no cuesta nada— sale.
Abre los ojos topándose conmigo.
— Pensé que eras una pesadilla, pero realmente eres un grano en culo. — Se voltea dándome la espalda — déjame.
—Nena... — Me siento en la cama — ¿como te sientes
— De puta madre ¿qué no ves?
— Nena, escucha, hagamos las
pases. — Me mira con el rabo del ojo— mírame... — Se voltea de mala gana.Agarro su brazo atrayéndola a mi, mira mis ojos, baja la mirada a mis labios y vuelve a los ojos. Doy una ultima calzada al cigarrillo para apagarlo en el cenicero.
— ¿Por qué?— Se cruza de brazos— ¿Por que no te desases de mi y listo? — se arrodilla quedando a mi altura.
— Por qué no puedo...— Devoro sus labios con fuerza, hago de su cabello un puñado para que me mire.
— ¿Qué es lo que quieres? — preguntó sobre mis labios
— Ahora mismo... — Besó sus labios — Quiero follarte
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Un Maldito Mafioso
RomanceÁmbar hará todo lo que esté a su alcance para encerrar a Wolf en una cárcel, incluyendo así, metiéndose entre sus sabanas. •••••••• Esta historia es completamente mía No permito copias