Mitsuki había ordenado a los dos jóvenes que convivieran y aunque ambos tenían sus respectivos trabajos y agendas extremadamente ocupadas, Katsuki era el asistente del jefe de recursos humanos de la compañía de su padre e Izuku era el asistente del departamento de medios de la misma empresa, los dos debían reunirse a la hora del almuerzo y fingir que se amaban.
Mitsuki sabía que Todoroki no se quedaría tranquilo y no creería en el amor que Katsuki le profesaba al recién llegado asistente de medios. Así que ambos debían ser muy cautelosos y fingir bien. Izuku todos los días llevaba un almuerzo preparado por su madre ya que el Omega se negaba rotundamente a cocinar para ese alfa idiota, mientras que Katsuki cada día debía ir por el a la hora del almuerzo para comer juntos en algún espacio público de la empresa, además de ir por él para ir al trabajo y llevarlo de regreso a casa.
-Este fin de semana, saldré con mis amigos -notificó Izuku cuando el auto de Katsuki estuvo frente al departamento del peliverde- tengo ganas de sentir cariño real para variar.
-Me importa poco lo que hagas en tu tiempo libre -dijo más molesto de lo usual- sólo no hagas ninguna tontería.
-ni que fuera tú y si por tontería te refieres a coquetear con alguien, puedes estar tranquilo, no iré a algún lugar que puedan conocerme o conocerte...
-Deku...
-No tengo ningún compromiso real contigo, si alguien me gusta puedo...
-Haz lo que quieras... De todos modos no encontrarás a alguien mejor que yo...
Ya que soy todo lo contrario a ti, que eres un omega reempla... -Kacchan cerró su boca pero ya era tarde...
-Kacchan realmente... ¿Tan poco valor tengo para ti? -cuestionó dolido.
-Izu...
-No te atrevas a decir mi nombre, no huyo de esto sólo por tu madre... Pero cada vez me dejas claro que eres un imbécil.Deku ya no le sostuvo la mirada, estaba por llorar, no quería que lo viera así, no era justo que la persona que más quería lo tratara así. Katsuki lo asió para que no pudiera bajar del auto y arrancó el vehículo antes de que Izuku se bajara. Estaba muy enojado con él mismo; no quería lastimar más a Izuku pero seguía haciéndolo, si nunca se creyó merecedor de su cariño en ese instante mucho menos, cuando la situación lo obligaba a casarse sólo por conveniencia con él.
-¡Kacchan! ¿Qué demonios te pasa?
-Sólo usa el maldito cinturón de seguridad y no digas nada hasta que lleguemos.
-¡Estás loco! -exclamó pero obedeció.Se mantuvieron callados, incluso cuando Izuku reconoció a dónde se dirigían. Esa cabaña que era uno de los mejores recuerdos compartidos con Bakugou. Ahí pasaron fines de semana enteros jugando a ser súper héroes, ahí Izuku conoció el amor por primera vez.
-Baja... -indicó Katsuki cuando se estacionó y le abrió la puerta del vehículo- por favor -le tendió su mano.
Izuku aceptó el ofrecimiento y dejó que el rubio lo guiara hasta ese pequeño lago que conocía tan bien. Todo era tan irreal que casi olvida el enojo que tenía, pero su orgullo era más fuerte en ese momento y se soltó del agarre para ir al auto de nueva cuenta.
-Maldición Deku.
-¿Qué pretendes al traerme hasta aquí? Lo que sea que quieras no me interesa, así que búscate a otro Omega que sí quiera estar contigo para...
-No quiero otro omega -dijo- no quiero a alguien que no seas tú....
-¿Qué? ¡No te burles de mí!
-No lo hago, por favor... -la mirada rubí del alfa parecía sincera, tanto que casi convencía a Izuku.
-Kacchan ¿que me quieres decir?
-Que no puedo hacer esto si no eres tú, la boda, el fingir ser pareja, toda esta mierda en la que nos metió mi viejo.
-¿Sólo me quieres para ganar la presidencia? -dijo dolido.
-No...
-¿Entonces? ¿Qué más quieres? Desde que volví, te has comportado como un patán, jamás te he lastimado y anhelaba volver a verte pero rápido entendí que no era lo mismo para ti... Si no me quieres sólo para ayudarte con la farsa dime qué...
-También te necesito para esto...Kacchan no lo soportó más, sentía una frustración horrible, casi podía creer que sentía la ansiedad y dolor de Izuku, él tampoco podía ya con lo que sentía así que con cuidado tomó su rostro y lo besó sorprendido a Izuku. Desde que Izuku regresó a su vida, no podía ignorar nada sobre él, ya no era ese mocoso loco por los héroes, ahora era el omega más hermoso del mundo, luego de separarse por años, el reencuentro le hizo darse cuenta que no era digno como alfa pero, en este punto poco importaba ya que amaba a ese chico y entró en alerta cuando dijo que buscaría a alguien más, no importaba que su boda sería buena farsa, sabía que no quería disolver el matrimonio, ganara o no la presidencia
Izuku por su parte tenía los ojos abiertos por la sorpresa, quiso pasar sus manos detrás del cuello del rubio pero las palabras hirientes de su interlocutor resonaban es su cabeza. Lo empujó y quiso golpearlo, gritarle, maldecirlo pero sólo podía jadear ya que el llanto atorado en su garganta le impedía hacer algo más que boquear por aire.
-Izuku...
-¡Cállate! -exclamó- por favor llévame a mi casa... No voy a permitir que juegues conmigo para asegurar...
-Está bien... ¿Sabes? Esto es una mierda... Si alguna vez pensé que podría imaginar algo contigo, mi viejo la cagó con esa maldita cláusula.
-No pretendo creerte... -Izuku trataba de mantenerse firme- Seguiremos fingiendo... podremos ser "cariñosos" en público pero sólo eso, fuera de los ojos ajenos tú y yo no somos nada.
-Lo sé... Vámonos...El viaje de regreso ninguno dijo nada, se dedicaron a ver hacia delante. Cuando llegaron al departamento de los Midoriya, Bakugou lo detuvo antes de que Izuku saliera del auto.
-Soy un maldito, pero quiero dejar claro que el único reemplazable aquí soy yo... Aunque busque toda mi vida jamás encontraré alguien como tú, eres lo único bueno en todo este lío de la empresa y agradezco a al viejo que tú fueras a quien escogiera para todo el proceso.
Izuku estaba sorprendido ¿Kacchan realmente podía expresarse así? Sintió como tomó su mano y la besó. Sin de ir más el peliverde salió del automóvil y vio desde la acera como se iba. En ese punto estaba confundido, por suerte al día siguiente no tendría que verlo, sus nervios podrían descansar un poco. Aunque debía admitir que aún recordar el tacto de sus labios con lo de Bakugou, lo hizo dejar salir una sonrisa...

ESTÁS LEYENDO
Atados... (1ra edición)
FanfictionAhí estaban uno frente al otro, cada uno observaba esos orbes esmeraldas y rubíes del contrario. Esos que conocían bastante bien desde su infancia. Bakugou Katsuki debía casarse para heredar la compañía de su padre recién fallecido. Midoriya Izuku d...