𝑳𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒇𝒖𝒆... ~•𝑴𝒊𝒏𝒔𝒖𝒏𝒈•~

𝕺𝖓𝖈𝖊

Minho ya habia despertado con Han a su lado, el castaño descansaba tranquilo abrazando su torso mirandose indefenso, Minho recorrio con su dedo indice las facciones de Jisung, "¿Cómo puedes ser tan hermoso?" "Tiene unos bonitos labios"... Cada parte que su dedo trazaba; sus pensamientos tenian que ver con ello, sin darse cuenta ya estaba sonriendo ya que el solo ver a Han Jisung su mundo brillaba. Lo contemplo hasta que abrio sus ojos.

―Hola dormilón ―sonrio

―Hola ―dijo tallando sus ojos― ¿tienes rato despierto?

―Para nada

―Mentiroso ―sonrio Jisung.

―Me quedaria por horas viendo esta imagen de ti cada mañana y no me cansaria ―dijo sin pensarlo mucho.

―Min... ―tapo su rostro sonrojado

―El que deberia sentirse avergonzado soy yo por decir eso ―rio―. Vamos dejame verte ―quito las manos de Jisung tapando su propio rostro.

―¿Te gusta verme avergonzado o qué? ―hizo un pequeño puchero.

―De todas las maneras te ves hermoso, Hannie ―acaricio la abultada mejilla contraria

―No cuando lloro ―casi murmuro

―¿Segun quien? ―pregunto― Riendo, emocionado, triste, enojado o llorando. Sea la forma que sea puedo apostar que sigues viendote igual de radiante

―Gracias por decir eso ―sonrio.

―Soy honesto. ¿Quieres comer algo?

―No tengo mucha hambre y aunque fuese asi, posiblemente regresaria todo lo que comi...

―No te preocupes, cuidare que eso no suceda asi que vamos

―¿Ya esta hecha? ―pregunto con sorpresa

―No pero no pienso dejarte aqui solo, esperame sentado donde pueda verte ―dijo sonriendo.

―De acuerdo ―tomo asiento en el suelo―. ¿Qué hora es?

―Son las ocho de la noche

―Dormimos toda la tarde ―solto una risa corta.

―Pero descansaste bien, parecias tener un buen sueño

―Si, descanse muy bien para ser honesto

―Bueno ahora vayamos a comer ―extendio su mano

―¿Puedo ayudarte a cocinar? ―tomo la mano de Minho y se levanto

―Su gustas, seria...

―¿Agradable? ―sonrio.

―Si. Muy agradable ―devolvio la sonrisa.

Ambos caminaron a la cocina sin ser conscientes de sus manos entrelazadas, asi mientras terminaban de preparar la cena riendo y contando cosas, por ratos jugaban pero en otros solo se miraban sonriendo.
Jisung habia olvidado como se sentia convivir asi con alguien, con Hyunjin, y aunque una parte de el deseara que su esposo se encontrara con el en vez de Minho, la otra sentia calidez y extrañas emociones diferentes con una pizca de culpa. No queria enamorarse, no debia, ya que seria hacerle lo mismo que Hyunjin le estaba ocasionando. Jisung y Hyunjin no eran iguales, no actuaria de la misma forma.

―Vamos Sunggie, sientate

―Te ayudare a poner la mesa