Los gemelos DongDong~. 「 CyaDong 」

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Jun se sentía raro, aún no digeria el hecho de que su mejor amigo lo beso. Tantos pensamientos recorrieron su cabeza, como: "¿Por qué?" "Acaso... ¿yo le gusto?". No lo comprendía, quería pensar rotundamente que su amigo solo se había dejado llevar y que lo que pasó no fue algo real. Si, eso debía ser, por que no era posible que un chico quisiese a otro chico, estaba muy mal visto.

Salió de su casa y divisó a su mejor amigo afuera de su puerta, al verlo los nervios lo invadieron. Se quedó estático, no sabía que decir o hacer. Él castaño solo lo observo atentamente, notando el obvio comportamiento incómodo de su amigo. Bajo la mirada tristemente y se dirigió a él.

— Vamos... se nos hace tarde. -Dijo sin más y empezó a caminar por la acera-.

— E-Espera. -Mientras lo agarraba de la mano- ¿N-No hablaremos... de lo q-que pasó ayer?. -Comento entre curioso y enojado-.

Si, enojado, por que él se la pasó toda la noche pensando en lo ocurrido y en como tocar el tema, tanto que no pudo dormir. Pero en cambio el castaño parecía que no le importaba la situación, tan tranquilo. Entonces eso lo enfureció, ¿Por qué él tenía que ser él único que se mortificara tanto cuando él no lo hizo?.

— No hay nada que hablar. Tu mirada y actitud me lo dijo todo. Sabes, sabia que no pasaría nada, solo déjalo ¿si?. -Mientras lo observaba con una sonrisa triste-.

— Pero... aún así son tus sentimientos. No quiero dejarlos de lado aunque no los corresponda. -Comento serio- Quiero saber que te hizo llegar a la desicion de b-besarme. -Apenado camino a su lado-.

— Así que me estás rechazando.

— ¡No! Bueno... -Comento preocupado-.

— Calma, es broma. Aún así... no me pienso rendir. -Mientras le metía un zape y salió corriendo en dirección a su escuela-.

Jun al recibir el golpe corrió atrás de él a toda velocidad y sin más el tema quedó a pasado, por lo mientras. En todo el transcurso del día él alto se percató de algunos actos cariñosos por el castaño. Que si, este solía siempre entregarle muestras de cariño, pero ahora eran un poco más frecuentes. Y por alguna razón no le molestaba en lo absoluto, hasta podría decir que lo disfrutaba, ya que cada caricia, cada abrazo eran tan reconfortantes para él.

Sin pensarlo empezó a regresar aquellas muestras de amor, por que... realmente le nacía hacerlo. Ambos sin darse cuenta el tiempo había pasado, y aquellos sentimientos profundizaron para ambos. Para DongMyeong que estaba completamente enamorado del alto y para Jun que tal vez ya estaba considerando los sentimientos reprimidos del pequeño. Que a pesar de no catalogar lo que pasaba entre ellos aún así lo disfrutaban. Por que estaban al tanto que su cercanía había subido a algo más que amigos.

— Junnie. -Llamo él castaño mientras se acomodaba entre los brazos del alto. Este al sentir el movimiento lo acomodó de una forma para poder verlo a los ojos-.

— ¿Si solecito?.

— Ay, deja de decirme así. -Con su mano derecha empezó a picotear la panza ajena haciéndolo reir-.

— Ya, ya. -Con una gran sonrisa- ¿Qué pasó?. -Prestandole toda la atención del mundo-.

— Ammm. -Se removió un poco poniendo su mirada en el techo de la habitación del mayor- ¿Estas... consiente de la cercanía que. -Traga un poco de saliva- Estamos teniendo?. Ya sabes, no es muy normal abrazarte y besarte de vez en cuando con tu mejor amigo. -Comento un poco avergonzado-.