Los gemelos DongDong~. 「 CyaDong 」

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Tenía que ser directo y claro, eso lo sabía, pero... ¿Por qué le estaba costando tanto en ese momento?. Tal vez por qué sabía que lo que diría sería doloroso, nadie mejor que él sabía que era recibir rechazos. Se acomodó bien en su asiento, se sentía incómodo, buscaba las palabras correctas para poder decirle al chico sin herirlo mucho.

Mantenía la cabeza baja, no quería observarlo, esta sensación era extraña, ya que después de todo a él no le importaba, pero ahí estaba dudando. Al levantar su mirada, ahora que lo veía no podía, solo con ver esos ojitos llenos de amor y brillitos hacía que se sintiera peor. Él chico que tenía enfrente de él agarró su mano así llamando su atención, su mirada estaba clavada en él y portaba un pequeño sonrojo.

— Sabes... me gustas desde hace unos meses, cuando te vi pensé que eras un bello ángel. Uno lindo y agradable. -Se sonrojo- Quería conocerte pero, tenía miedo de arruinarlo y quedar en ridiculo. Quería que me notaras.

DongMyeong sintió un nudo en su garganta, esto era mucho, vaya que su hermanito había enamorado a una joyita sin darse cuenta, un chico lindo con sentimientos puros. Por esa razón sentía feo rechazarlo, él chico se estaba sincerando enfrente de él, mientras lo engañaban. Pero también era cruel decirle que si mientras su hermano no sentía lo mismo. Sería muy doloroso para ambas partes.

No cometería lo mismo que le hicieron a él, mantenía el rostro bajo, sintió la mano ajena apretaba cariñosamente la suya. Esto lo espanto un poco, así colocando su vista en la contraria. Su corazón brincó de un lado a otro, por alguna extraña razón no aguantaba la mirada del chico tan atenta en él, simplemente lo agobiaba.

— No pido que me respondas ahora, ya que después de todo no nos conocemos realmente. -Sonrío amargamente- Pero quiero conocerte y mostrarte que puedo hacerte feliz, por qué eres alguien que se lo merece.

Él mayor sintió su corazón oprimirse, así que rápidamente sacó sus manos, así sorprendiendo un poco al chico. Este solo sonrió tristemente, mientras acomodaba sus cosas. Levantó lentamente la mirada para ver al chico que lo seguía observando.

— No te preocupes. -Le sonrío- Vamos a un lugar más divertido, como dije. -Agarrando su mano mientras sonríe- Quiero conocerte, así que vamos~.

— ¿D-Disculpa?.

Estaba desconcertado, técnicamente le había rechazado, tal vez no directamente pero lo había hecho. Todo debía haber acabado ahí, dejaría el lugar y volvería a ser él DongMyeong de siempre, pero ahora era agarrado de la mano para salir del local juntos. ¿Por qué dejó que le tomara la mano y lo llevase con él?, no sabía, simplemente se dejó llevar. DongJu observaba atentamente desde un local de postres, estaba nervioso hasta los huesos.

Estos se intensificaron al ver a su hermano gemelo saliendo del local agarrado de la mano del chico. ¿Por qué se estaba yendo con él?, se supone que tenía que volver solo. Cuando intento dar un paso para poder alcanzarlos alguien le agarró su brazo. Así llamando su atención, levantó la mirada viendo a uno de sus amigos, KeonHee. Este se vestía ropa deportiva y en su rostro había una gran y reluciente sonrisa.

— ¿KeonHee?, ¿Qué haces aquí?. -Dijo confundido-.

— Estaba paseando por aquí, quería comprarle algo a SeoHo. -Dijo Sonriendo- Pero te vi aquí solo, así que pensé en venir a hablarte.

— Ya veo... -Buscando con la mirada la silueta de su hermano, pero este ya no se encontraba- No lo veo...

— ¿Quien?. -Buscando con su mirada- ¿Esperabas a alguien?.