𝐒𝐨𝐮𝐥𝐦𝐚𝐭𝐞. |𝐕𝐌𝐈𝐍|

Capítulo cuatenta.

Taehyung y Jungkook se dieron un gran abrazo y al separarse, el castaño lo miró sonriendo para luego sentarse junto con el rubio.

- Yo... No sabía que ustedes se habían separado, pero, llamé a Jungkook porque necesitaba ayuda.

- Cuándo Jimin me dijo que estabas preso por haber matado a Euno... No podía creerlo. Realmente no podía creer que llegaras a hacer eso, pero, el me contó todo, como fueron las cosas. -Dijo mientras lo miraba y suspiraba-.

- Tu papá...

- Si, sabes que es abogado, el decidió ayudarte porque te tiene mucho aprecio... Pero, Jungkook, lo siento mucho por Jimin pero este no es un crimen que tú cometiste, no puedes echarte la culpa de este modo.

- Claro que si, Jimin vivía un infierno con ese hijo de puta, realmente estoy feliz de que lo haya hecho y si el no lo hacía, yo lo hubiera matado tarde o temprano.

- Taehyung... -Dijo el pelinegro-.

- Yo... Se que lo que hice está mal y si pudiera volver el tiempo atrás no lo hubiera matado, no era la solución... Le facilité todo en vez de correr a la policía y que se pudra en la cárcel. Yo debería pagar por lo que hice.

- Jimin, no puedes estar diciendo esto... No sobrevivirías ni un maldito día aquí. Déjame cumplir la condena a mi y listo.

- Tae eres tan... Idiota, realmente es increíble lo que puedes soportar por alguien quien quieres. -Dijo el pelinegro mientras suspiraba-.

- Por ti también lo haría si fuera necesario.

- Jamás permitiría algo así.

Taehyung suspiró mientras miraba hacia otro lado y en ese momento, Jimin puso su mano encima de la de el y allí se miraron.

- Jungkook tiene razón... Realmente no mereces esto, y yo tampoco merezco que hagas esto por mi.

- Jimin...

- Vendré todos los días a verte y estaré en todo momento apoyándote... El padre de Jungkook te ayudará también y saldrás rápidamente de aquí. Estamos aquí para ti. -Lo miró y sonrió-.

- Gracias, Jimin.

- Ahora iré a firmar una cosa así los dejo solos. Nos vemos pronto.

- Adiós.

El rubio se levantó y se fue mientras que dejaba al castaño y al pelinegro solos. Jungkook se sentó en dónde estaba sentado Jimin y sonrió mientras jugaba con sus manos.

- Aún brillan tus ojos cuando lo ves...

- Kook.

- Nono, tranquilo, no vine a reprochar ni nada, solo vine porque Jimin me llamó desesperado y porque no podía dejarte solo...

- Lo siento.

- Esta bien, no te preocupes. Mis papás... Me dijeron que me buscaste.

- Si, me encantaría decir muchas cosas ahora, pero, no voy a decir nada porque entiendo porque te fusite. -Dijo mientras lo miraba y tomaba su mano-.

El pelinegro sonrió y acarició su mano.

- Te extrañé mucho.

- Yo te extrañé más...

- No vine aquí a que volvamos a estar juntos... Sigo sosteniendo que quiero que hagas tu vida con Jimin o cualquier persona a la que ames, solo estoy aquí como tu amigo.

- Lo sé, Kook.

- Me quedaré aquí a hacer todo lo que esté a mi alcance, hasta que salgas... Luego, iré a seguir mi vida al extranjero.

- Esta bien... Yo, no quiero ser una carga para ti, puedes decirle a tu padre que no me defienda y tú, puedes volver a irte si lo deseas.

- No, que ya no estemos juntos no significa que no te ame ni te tenga en mi corazón todavía... Eres mi alma gemela y cuidaré de ti siempre, porque sé que tu harías lo mismo si fuera al revés.

Al escuchar aquello, Tae sonrió y asintió para luego, los dos levantarse y volverse a dar un abrazo. Eran almas gemelas pero no destinadas a estar juntas como pareja... Sólo como amigos.