Más Allá De Las Luciérnagas

Capítulo 6

                                 Viñedo

Retoque mi maquillaje por última vez en el espejo del tocador.

—Listo–dije mientras miraba si faltaba algún detalle, básicamente era un poco de sombra café en mis párpados, corrector, máscara para pestaña y un lindo labial rosa.

Fui al espejo de cuerpo completo verificando mi atuendo.

—Todo esta perfecto–escuché algunos golpes en la puerta-Adelante.

—Señorita es hora de irnos.

—Ya estoy lista-dije mientras agarraba mi bolso.

—La espero en el auto.

Salí de mi habitación rumbo al auto de nuestro chófer. Muero por ver sus reacciones al verme subir en el, nunca fui fan de estas cosas, reuniones, negocios, fiestas elegantes nada eso era mi estilo así que evitaba a toda costa asistir a algún tipo de evento social.

—¿A donde crees que vas?.

Volteé para ver quien era la persona que me estaba preguntando aunque desde un inicio ya sabía de quién trataba.

—A la empresa–subió su ceja con notable incredulidad.

—¿Tú? ¿a la empresa? esto debe ser una broma–yo seguía viéndola desde el auto–estas cosas nunca te interesaron ¿a que se debe ese repentino interés?.

—Tranquila mamá pasaré desapercibida, no notarás mi detestable presencia–dije con sarcasmo–y te recuerdo que también es mi empresa, así que no le veo el problema de empezar a interesarme más en ella, al fin y al cabo es algo que nos va a quedar.

No se creyó ni una sola palabra, lo pude notar por sus ojos entecerrados como queriendo buscar alguna pizca de duda en mi rostro, pero eso no iba a pasar. Si decía la verdad en querer ir a conocerla, habían pasado 3 años desde que partí, algo tuvo que haber cambiado.

—Como sea–avanzó con paso seguro hasta la puerta contraria–súbete que nos retrasas.

—Como mande.

Todo el ambiente estaba tenso como si un simple cuchillo pudiera cortar el aire que nos envolvía, dentro de ese ambiente tan asfixiante me dispuse a mirar mi celular en busca de mis chats para comprobar si no tenía algún mensaje.

《Ni amigos tienes, mentirosa》

Oh conciencia a veces eres tan irritante, pero tragandome mi orgullo tenia razón, las "amigas" que había conocido solo fueron por mero interés

《Interés llamado Renacueajo de dos patas o también conocido como Lucas》

Era como su pase hacia el "paraíso"aunque mi adolescencia no fue tan mala, conocí a una chica que realmente fue una amiga, no se acercó por interés ni nada, Solo por mi.

《Además preparaba unas ricas galletas con chispitas de chocolate》

Esa chica tenía manos mágicas. Estuve en contacto con ella durante un año pero luego desapareció o mejor dicho, yo desapareci perdiendo total comunicación con ella.

《Y por ello Morirás sola》

¿Estas consciente que si muero, tu también lo harás?

《Claro que no, viviré hasta el fin de los siglos y cuando vuelvas a nacer estaré ahí para decirte de todo lo cool que te perdiste》

Aja, ¿ Y como piensas ejecutar ese plan maravillosa conciencia?

《No todo en la vida se puede saber》

Necesito amigos con urgencia, mi estado es delicado, ¿Como puedo pelear con mi conciencia? Dios. Siempre tuve esa manía de hablar sola o bueno con ella, mi querida conciencia algo extraño pero a la vez divertido.

—¿Que te parece la idea Farid?–me voltee hacia mi padre–¿crees que sería un buen movimiento?.

Quedé en blanco, ¿de que hablaban?

—Disculpa papá, ¿podrías repetirme de lo que estaban conversando?

—¿Y así pretendes dirigir tu parte de la empresa?- y puff apareció Don Quejas.

—No vayan a empezar–dijo con una clara advertencia en su mirada–lo que decía Farid, es que estamos intentando hacer una nueva estrategia de mercadeo.

—¿Y de que se trata?-inquiri.

—Queremos hacer una feria, donde todo el mundo pueda ir y tomar una muestra de nuestros vinos.

Y si, nuestras empresa se trataba de los vinos, un negocio que paso de generación a generación.

—Eso podría animar a la personas a probarlo–concorde–¿y cuando sería?

–La fecha aún no la tenemos establecida, aunque un aproximado sería entre 3 semanas-contesto Lucas

—bien, ¿Ya saben que vino piensan repartir?

—Desde que te fuiste hemos estado trabajando en una cosecha especial-empieza a contar mi padre-tuvimos varias muestras pero ninguno parecía de nuestra altura.

—Aprovechamos la cosecha de este mes, hoy vamos a darle el visto bueno-termino de decir Lúcas.

—Eso es genial, hacia mucho tiempo no se animaban a sacar un nuevo vino. ¿Ya saben el nombre?-pregunté.

—Es algo que no hemos decidido-contesto mamá–pero tiene que ser algo que nos representa de manera elegante e imponente.

Cuando iba a dar un nombre Martín detuvo el auto haciendo referencia de que ya habíamos llegado. Bajé y caminé.

Mi vista recorrio toda la estructura, no era un edificio muy grande, con sus respectivos ventanales, el nombre de nuestra marca y lleno de trabajadores. Espere a que papá bajara para poder ir a la par con el, aún no me convecia al 100% que estaba relativamente bien, prefería mil veces que estuviera en casa.

Al entrar recibí muchas miradas curiosas por parte del nuevo personal que no tuve la oportunidad de conocer.

-Bienvenidos familia Visier-una mujer de unos 40 años aparecio-Señor ya tenemos el auto listo para llevarlos al viñedo, acompañenme por favor.

Seguimos sus pasos, hasta un pequeño auto blanco el cual supongo nos trasladará hacia el viñedo. Nos subimos y automáticamente el conductor puso en marcha al vehículo.

Al llegar todo era hermoso, había una pequeña casa de colores neutros, muebles y y un pequeño columpio-si que a cambiado todo- pensé. Ya mamá junto con papá estaban adentro de la pequeña propiedad, por mi parte quise alejarme un poco. Era todo tan hermoso, el sol no podría brillar más, la líneas de la cosechan se podían observar desde mi posición, el aire te daba de lleno en la cara haciéndote sentir como si estuvieras volando.

《Esto si es vida》

Ni que lo digas, me quedé un rato disfrutando la sensación para después volver.