Capítulo 8: Cita.

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Capítulo 8: Cita.

Jungkook no puede negar lo emocionado que se siente al recibir esa llamada y no únicamente porque él puede ayudarlo con lo de la ropa, sino porque había estado pensando en llamarle por días, solamente que no sabía cómo hacerlo o qué tema poner en conversación para que no fuera aburrida ni decepcionante. Sin embargo, justo ahora, una sonrisa brillante se posa en sus labios cuando escucha la voz de Jimin decirle:

—Me encanta ser útil —menciona con una voz risueña—. Hola Jungkook, cuánto tiempo.

—Bastante, a decir verdad ¿no quedamos en que hablaríamos pronto? —cuestionó mientras ponía el altavoz.

—Tienes razón, pero como dicen "si la montaña no va a Mahoma, Mahoma irá a la montaña" y aquí me tienes.

—Cierto, lamento no haber contactado contigo a pesar de que dije que lo haría —dijo mientras se rascaba la cabeza.

Jungkook escucho la risita de Jimin y sonrió sin pensarlo.

—Nah —dice él restándole importancia—, tus motivos has de tener, así que no hay problema. ¿Tan siquiera pensaste en mí en este tiempo?

—Claro que lo hice —responde como si estuviera ofendido—, ¿por quién me tomas?

Hoseok observa a Jungkook mientras habla por teléfono, a la misma vez que él escucha lo que el chico detrás del teléfono dice, sin embargo, le toma de sorpresa el descarado coqueteo que ellos están teniendo justo ahora y como el defensor de su mejor amigo que es, antes de que el chico responda grita indignado:

—¡Estas engañando a mí mejor amigo! —la voz sale demasiado chillona, por lo cual más que enfadar, hace reír a Jimin tras el teléfono.

—Fuertes declaraciones —menciona él entre risas—, ¿estoy en altavoz?

Jungkook mira a Hoseok mientras este se acerca a él y toma el teléfono de sus manos, observa como quita el altavoz y dirige el teléfono a su oreja. El más joven no sabe exactamente qué es de lo que ellos están hablando, pero lo que sabe es que se siente excluido, pues está siendo deliberadamente ignorado. Hoseok sonríe mientras acepta ir a quién sabe dónde y se despide amablemente de él otro chico en cuestión. Después de colgar el teléfono, toma de la mano a Jungkook y lo jala hacia la sala.

—¿Se puede saber a dónde me estás llevando? —cuestiona Jungkook, sin embargo, no se resiste.

—No —responde Hoseok—, tu solo acompáñame.

Jungkook ríe ante la respuesta y niega levemente con la cabeza. Observa como Hoseok toma las llaves de su auto, del departamento y sus lentes de sol, dejando de lado sus gafas que usa para trabajar y hablando de trabajo, Jungkook se cuestiona si de verdad Hoseok tenía mucho trabajo por hacer o simplemente fue una excusa para que él saliera y pudiera ver a Taehyung por lo menos unos momentos. Tal vez sea algo de lo segundo, porque justo ahora, bajando en el ascensor con dirección a Hoseok sabe dónde, no parece que él tenga mucho por hacer en casa. De todos modos, piensa Jungkook, Hoseok también merece distraerse del trabajo, nunca había conocido a alguien tan entregado y responsable como él, tal vez únicamente su madre, pero fuera de ahí a más nadie.

Una vez entran al auto, ellos se ponen el cinturón de seguridad y Hoseok conduce fuera del estacionamiento. En el camino, ellos escuchan un poco de música en la radio, hay un top 10 en la estación y disfruta de la música. Algunos artistas que salen, no los reconoce, pero admite que las canciones son pegadizas. Después de unos diez minutos de conducción, Jungkook observa cómo se adentran al centro comercial, Hoseok baja del auto una vez se estacionan y le dice:

Jeon Jungkook: Flee From Home  {taekook}✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora