CAPITULO 25

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Me levanto poco a poco de la cama y me pongo las manos en la cabeza, ayer después de la carrera fuimos a celebrar que Asher ganará y bueno la cosa acabó con las chicas borrachas y los chicos llevándonos a rastras al departamento. Levantó la cabeza y veo a Asher salir del baño con una toalla alrededor de la cintura, y el pelo mojado.

—Buenos días. —me da una sonrisa.

—Serán para ti, tengo un dolor de cabeza que me está matando. —gruño, Asher se acerca y me da un beso casto en los labios.

—Me voy a la ducha. —me levantó y arrastró los pies hasta el baño bajo la atenta mirada de Asher.

Me meto en la ducha y tardo una media hora recuperándome de la nochecita de ayer. Cuando salgo de la ducha me visto y me pongo unos pantalones azules oscuros de campana, un top de tiras negro, y mis convers. Bajo las escaleras y me voy directamente al armario para coger una pastilla, me siento y me la tomo.

—No me dejéis beber nunca más por favor. —suplico y río.

—Ayer no te quejabas. —me dice Axel.

—Si bueno, ayer estaba emocionada por Asher y me animé pero de verdad no me dejéis.

—No, ni a mi. —dice June y Brooke la sigue.

—Tengo una idea. ¿Por qué no pasamos un día de chicas? —dice June más animada. La verdad es que me apetece a pesar de que no me encuentro muy bien.

—Yo digo que sí. —le digo y me sonríe.

—Igual. —me sigue Brooke.

—¿Nos abandonais? —nos preguntó Eider.

—Si. —respondemos las tres al unísono.

—No pasa nada, nosotros haremos un día de chicos. —sonríe Axel.

—Sillon, play y cervezas. —dice Asher sonriendo y Eider le sale una sonrisa.

—Acepto. —afirma Eider.

Salimos sobre las doce del mediodía después de despedirnos de los chicos los cuales ya estaban con latas de cervezas y gritando como posesos a la play. Nos montamos en el coche de Brooke y nos fuimos directas al Westfield San Francisco Centre. Cuando llegamos vamos al Burger King y nos pedimos unas hamburguesas para comer, terminamos y decidimos ir a mirar ropa. Rato después llevó una bolsa con ropa nueva y las chicas alguna más. Pasamos delante de un sex shop y ya se lo que viene ahora.

—Tenemos que entrar. —dice June parándose y mira la tienda.

—Está bien. —digo y entramos las tres.

Empezamos a andar por los alrededores de la tienda y miro algunas cosas. Las chicas se vienen a mi lado y miro que June lleva unas cuerdas y telas y Brooke dos tipos de esposas diferentes, las miro con la ceja enarcada.

—¿Qué es esto, cincuenta sombras de Grey? —rio.

—Quiero probar cosas nuevas. —mueve las cejas June.

—Igual yo, me gusta tener el mando y con estas de aquí seguro que lo tengo. —dice Brooke y alza las esposas con cara diabólica haciéndonos reír.

—Vale, pues pagad y vamos a otro sitio. —las digo.

—Oh no no no, tu no te vas de aquí sin algún juguetito.—ruedo los ojos.

—No me voy a negar, pelear contigo es una batalla perdida. —digo con una sonrisa y da saltitos a la vez que Brooke rueda los ojos.

Empezamos a buscar algo para mí y terminó en la sección de vibradores y aparatos que básicamente te succionan el clítoris, me de canto por el vibrador y salimos las tres con nuestras nuevas adquisiciones. Decidimos ir a una heladería y pedimos unos helados de Kinder, kit Kat y oreo para mí.

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