cuatro

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Narra Victoria.

Los rayos de sol empiezan a asomar entre las percianas dejando entrar la claridad en la habitación que estaba totalmente a oscuras.

Me despierto maldiciendo un poco. Antes de bajar a la planta baja, me estiro haciendo que algunas extremidades de mi cuerpo crujan.

Una vez abajo me encuentro con que mis padres ya están despiertos y están viendo las noticias de la mañana mientras desayunan.

- buenos días hija - dicen los dos a la vez.

- buenos días - digo acercándome a dejar dos besos en la mejilla de cada uno.

- Papá te ha comprado un croassant relleno de nocilla - comenta mi madre y yo asiento.

- gracias papá.

Escucho un "de nada" de su parte y voy a por mi desayuno, un zumo de piña y el croassant. Me siento junto a ellos a ver las noticias.

- este mediodía vamos a casa de los vecinos a comer - dice mi madre y asiento.

- ¿los habéis conocido? - le pregunto a mis padres.

- no - dicen los dos a la vez rápidamente.

Hago como que me los creo pero no me los creo para nada. Cuando los dos dicen algo rápido es porque mienten, que yo ya se identificar cuando mis padres mienten. No suelen mentirme demasiado, pero ahora mismo si que lo están haciendo.

- Victoria, vamos a ir a la sagrada familia ¿tú te quieres venir?

- si, voy a cambiarme.

- no vayas a tardar mucho - dice mi padre y yo niego.

Subo a mi habitación y como después de ir a la Sagrada Familia iremos a la casa de los vecinos, pienso en algo que sirva para ir medio cómoda medio formal para comer.

@victoriaaaaocaña

Nos montamos en el coche y nos dirigimos a la Sagrada Familia, el monumento más emblemático de Barcelona

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Nos montamos en el coche y nos dirigimos a la Sagrada Familia, el monumento más emblemático de Barcelona.

Mi padre aparca el coche donde puede, ya que estos aparcamientos están casi todos llenos y no es que sean muy grandes.

Andamos cinco minutos y llegamos a nuestro destino.

Nos encontramos ante la basílica católica de la Sagrada Familia, diseñada por Gaudí. El máximo exponente de la arquitectura modernista catalana.

- hija, ¿te parece si vamos a algún mercado y compramos algún detalle a los vecinos? - pregunta mi madre.

- estaría bien, ellos nos han regalado los dulces - digo y mi padre asiente.

- pues vamos.

Dulces que por cierto están de muerte.

- ¿unas flores? - pregunta mi madre y yo niego.

Rayito de luzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora