sᴇʀᴇɴᴅɪᴘɪᴀ |
"~ Hallazgo afortunado e inesperado que se produce cuando se está buscando otra cosa distinta ~".
Ella tuvo una vida difícil y con dieciséis años tuvo que hacerse cargo de su hermana menor, evitando que las separen y las envíen a un orf...
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❝ VICTORIA ❞
— ¿Pueden dejar de discutir? Por los ancestros, Melina esta dormida. —Araceli soltó un suspiro y la manada bajo la cabeza.
— Perdón mamá.— habló Jared. — Pero es que él no entiende.
— Ustedes no entienden, Bella solo esta confundida.
— Jake.— lo llamó Ara y este la miro.— Espero estar equivocada pero esa chica... Solo te utiliza.
— Ara...
— Jake, eh notado su comportamiento contigo cada vez que viene, y solo veo como quiere atención. — Jacob se puso a pensar, procesaba las palabras que Araceli le estaba diciendo.— Si no esta con el chupasangre, esta contigo, no puede estar sola, no puede estar sin atención. Charlie trabaja y no le presta la atención que ella quiere, que necesita. Piensa bien. Sinceramente espero estar equivocada, sabes que no me gusta juzgar a las personas pero...
— Si lo dices es por algo. — dijo asintiendo levemente. — Hablare con ella luego. — Araceli sonrió levemente. — Ara, ¿Me acompañas mañana al aeropuerto?
— ¿Para? — dijo Sam mirando serio al lobo. A Sam le costaba dejar a Araceli sola con Jacob desde el incidente en el bosque.
— Rachel me escribió, dijo que vendría por un tiempo.
— Eso es genial. — Ara sonrió. — Hace tiempo no habló con Rachel, Meli también estará feliz de verla.
— Ya lo creo, la enana la volverá loca... O quizás sea al revés. — ambos rieron pero rápidamente Jake se puso serio y Sam se tenso.
— ¿Qué ocurre? — preguntó ella y la manada comenzó a salir de la casa.
— Hay chupasangres en la zona. No salgas, enciérrate arriba con Meli. — le dio un beso en los labios y otro en la frente para salir corriendo junto al resto.
Araceli cerró la puerta con seguro y corrió escaleras arriba, entró a la habitación, trabando también esa puerta, en donde la pequeña Kenner dormía y se sentó a un lado de ella. Un ruido fuera de la casa la hizo ponerse en alerta, una parte de ella decía que era la manada merodeando pero la otra estaba inquieta, se levanto intentando no hacer ruido y se acercó a la pequeña ventana.
Por fuera no se veía nada, solo el leve movimiento que hacían las hojas de los arboles ante el viento, soltó un suspiro y volvió a recostarse junto a su hermana, acarició su cabeza por unos segundos hasta que sin darse cuenta se quedo dormida.
(...)
6am. La manada aún seguía intentando atrapar a los chupasangres, tenían a uno de ellos en la mira y lo corrían por todo el bosque intentando alcanzarlo. Por otro lado, en una pequeña cabaña en el bosque, dormían las hermanas Kenner o eso hasta que la más pequeña se levanto al escuchar un ruido provenir de la ventana.
