sᴇʀᴇɴᴅɪᴘɪᴀ |
"~ Hallazgo afortunado e inesperado que se produce cuando se está buscando otra cosa distinta ~".
Ella tuvo una vida difícil y con dieciséis años tuvo que hacerse cargo de su hermana menor, evitando que las separen y las envíen a un orf...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
❝ SE ACABÓ ❞
Un fuerte ruido capto la atención de las cuatro mujeres dentro de la casa. Araceli miro a su hermana, Melina se había despertado y jugaba tranquilamente en el piso de la sala muy ajena a lo que ocurría a su alrededor. Leah se puso en alerta y se acercó un poco a Melina protegiéndola de lo que sea que estuviera acechando fuera.
— ¿Leah? — Araceli miro a la loba.
— No puedo sentir su olor. Es raro.— la confusión en el rostro de la loba era notoria.
— Siento su aura.— dijo Vera y levantó su cabeza mirando el techo de la casa.— Está en el techo.
Se escuchó un fuerte golpe y Melina se levantó asustada corriendo hacia su hermana.
— Tranquila...
Otro golpe. Está vez en la habitación de la loba. Otro más en la cocina, otro en el techo.. Y otro...
Las mujeres miraban en todas direcciones pero no lograban ver nada. Hasta que todo quedó nuevamente en silencio. Ninguna decía o hacía algo.
Dos golpes llamaron a la puerta pero ninguna se movió al ver como Vega negaba con la cabeza. La insistencia en la puerta seguía, los golpes cada vez era mucho más fuerte y secos. La puerta cayó al suelo en un fuerte estruendo provocando que Melina gritase.
Por esta apareció un hombre con un gran atractivo, era bastante alto y con una complexión fuerte. Su rostro completamente pálido parecía dibujado con una belleza exquisita pero nada delicada. Su mirada penetrante y sus ojos rojos captaron la atención de las mujeres.
No había ningún rastro del hombre que algún día ella llamó papá. No reconoció al hombre frente a ella, pero no pudo evitar aterrarce al tenerlo nuevamente frente a ella aunque no lo demostró. Su rostro estaba completamente serio.
— Hola Araceli. — la voz ronca del hombre la hizo estremecerse — Tanto tiempo.
— Lárgate de aquí.— habló con firmeza dando un paso a delante.
— Claro, pero primero... Te mataré y me llevaré a MI hija.— su sonrisa arrogante provocó que la castaña solo enfureciera más.
El vampiro se movió muy rápido intentando acercarse a Melina y el caos comenzó. Vega luchaba contra el hombre mientras Leah ayudaba a su madre y a Melina a esconderse en el baño.
Ara tomo una lámpara que había en un mueble y la rompió contra la cabeza de Gastón al ver cómo su amiga estaba siendo acorralada por él.
Una onda invisible lo empujó fuera de la casa y Leah salió corriendo entrando en fase para atacarlo. Araceli veía como ambas chicas luchaban contra él, hasta que el vampiro logro deshacerse de la loba arrojándola hacia un costado. Leah golpeo su cuerpo contra un árbol y se logró escuchar un gemido de su parte.
