Siempre volveremos [loki y tú - temporada final]

[17. Tiempo]

—No, no, no.

—Sal de mi habitación, por favor.

Éste se apresuró a tomarle el rostro, haciendo así que lo mirara fijamente.

—Suéltame.

—¿El divorcio? ¿Estás pidiéndome el divorcio?

—Sí, ¿acaso no me escuchaste?

—¡No puedes hacerme esto, ___! —sus orbes azules se llenaron de lágrimas— No puedes dejarme por tanto tiempo, volver y luego decirme que quieres divorciarte de mí.

—Tú y yo ya no funcionamos más...

De pronto, estrujó un poco más su rostro.

—¿Estás haciendo esto por Strange?

—¿Q-qué?

—¿¡Te acuestas con el jodido de Strange y es por eso que te separas de mi!? ¿¡Es por ese idiota que no volviste!? —gritó.

—¡No!

Repentinamente, Thor llegó a la escena.

—¿Qué está sucediendo aquí?

Loki soltó a la mujer, soltando una risa rota.

—___ ya no me ama más.

El rubio frunció el ceño, fijando su vista en su mejor amiga, quien se cubría el rostro con las manos.

—¿No es así, linda?

—Yo jamás dije eso.

—¿¡Entonces por qué demonios quieres divorciarte de mí!?

—¿¡Cómo prentendes que siga contigo cuando me recalcas mis errores a cada maldito segundo del que tienes oportunidad!? —se levantó de la cama, soltando un grito— ¿¡Cómo pretendes que sigamos juntos cuándo ni tú ni yo somos las mismas personas, Loki!?

—¿¡Qué paso con eso de el amor es más fuerte que los problemas!?

—¡El amor no es excusa para soportar los maltratros!

—¡Ya basta! —interrumpió el rubio, posicionándose en medio de los dos.

Unos minutos después de que ambos calmaran sus respiraciones, el rey de Asgard volvió a hablar.

—Vengan conmigo, tendremos una intervención.

...

Más tarde...

Cada uno se sentó a cada extremo del sofá, mientras Thor y Peter estaban en frente hablando entre ellos.

—Muy bien, hablaremos esto de manera CALMADA. —demandó el rey.

Su hermano bufó.

—Esto es ridículo.

—Por favor señor Loki, sólo queremos ayudarlos.

—¿De qué demonios va a funcionar? ¡Ella quiere divorciarse de mí!

La castaña suspiró, apartando la mirada.

—¿Qué esperas que haga entonces, Loki? Has dejado muy claro en los últimos días que detestas el simple hecho de que mi presencia esté aquí, estoy segura de que preferirías verme muerta.

El hombre apretó la mandíbula.

—No te quiero muerta, ___.

—¿Qué es lo que quieres entonces?

—No lo sé, ¿de acuerdo? Simplemente no lo sé.

Ambos se miraron fijamente a los ojos.

Repentinamente, se quedó sin habla al ver esos preciosos ojos cafés.

Aquellos hermosos ojos que vio por primera vez en la torre Stark, acompañados de una dulce sonrisa.

Los que continuó viendo durante los años, como su amigo, su amante secreto, su novio y ahora como su esposo.

Los está viendo, como siempre los ha visto...

Con amor.

Un amor que estaba colgando de un hilo.

—No funcionamos de esta forma.

—Ya lo sé.

Thor y Peter se miraron entre ellos con gestos de preocupación.

No podían dejar que se separaran.

—Chicos, por favor no tomen una decisión a la ligera sólo porque ambos están dolidos.

—Tengo una mejor solución, ¿por qué no se dan un tiempo?

Ambos miraron a Peter con el ceño fruncido.

—¿Un tiempo?

—Sí, es cuando ambos solucionan sus problemas por aparte separándose sin separarse realmente, para luego retomar la relación en un mejor punto.

La Stark miró de reojo a su esposo, Loki la miró, para luego fijarse en su hermano.

—Debemos discutirlo, por favor déjennos a solas.

—¿Prometen que no se van a matar? —arqueó las cejas.

—No lo haremos.

—Está bien.

Los dos individuos salieron de la habitación dejándolos a solas, por lo cual ella se levantó del sofá, paseándose por la habitación, sin embargo el dios también se levantó, acorralándola contra la pared con sus rostros a una distancia respetable.

—Quédate quieta, me pones nervioso.

—Lo lamento.

El suspiró.

—Tengo un trato para ti.

—Te escucho.

—Tomaremos ese tiempo del que el mocoso acaba de hablar, cada uno se las arreglará para saber qué hacer en ese lapso, y cuando te sientas lista o me sienta listo, volveremos, pero si no es así, si en verdad ninguno de los dos puede más, firmaremos los papeles de divorcio, ¿de acuerdo?

—De acuerdo. —asintió.

Se separaron, estrechando sus manos.

Y en el fondo, cada uno esperaba que fuera un "tiempo" muy corto.

Lo que tal vez sería así, o tal vez no.

Tal vez volverían, o tal vez se irían.

Esta vez, para siempre.