Mi estimada y amada, Catherine.
Esta hubiera sido la primera carta en haberte escrito hace cinco años, preguntándote por tus días, por tus quehaceres e ilusiones. Ahora tengo cierto temor que esas dichas ilusiones hayan cambiado con tu regreso al campo, así que me ajustaré a preguntarte si tu madre sigue tan mandona o si tu hermana Alice sigue alimentando a vuestra adorada mascota que me tendrás que disculpar por haberme olvidado de su nombre.
Últimamente tiendo a tener problemas de concentración ya que echo de menos a una persona muy querida que ambos sabemos quién es. No es una broma si te digo que la casa está muy vacía sin ella desde que se fue hace una semana y me siento desolado al no escucharla, de reírme con ella y besarla. Me tengo que aferrar a mis principios para no ir y secuestrarte en medio de la noche. Te mereces más que una noche furtiva.
Mi promesa sigue en pie como también el deseo de volver a verte pronto.
No me olvides, tuyo.
H. C.
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No soy como ella (Volumen 2)
Historical FictionA veces el azar caprichoso o el destino marcado desde que uno nace, no le da opción a elegir, siendo una marioneta de unas manos que desconoce. Sin embargo, el amor, nadie elegía de quien se enamoraba porque en el corazón nadie mandaba sobre él. L...
