| 21 |

1.3K 116 21
                                    

Sebastián volteo y su gesto de sorpresa fue épico, soltó mi mano de inmediato y volvió a ver al frente de nosotros.

— Ahorita vengo — me informa

No respondo, se pone de pie y camina hasta el área de juegos donde están los niños.

Ricardo y Diana siguen viendo hacia acá, esta vez es Diana quien susurra algo en el oído de mi amigo y este asiente saliendo su trance.

— Gané la apuesta — logró articular sin hacer sonido.

— No — imita mi acto.

Camina hasta donde me encuentro y toma asiento donde antes, estaba Sebastián.

— Ese no era el trato — dice en un susurro

Volteo a ver a Diana que está sentada observando su teléfono, aun así no quiero que nos escuche por más lejos que ella éste.

Además, Sebastián por nada del mundo tiene que enterarse. Ahora que no lo sabe me odia y quiere matarme, no quiero imaginar si se entera, me come viva.

— Pero nos viste darnos un beso, es claro que gane — susurro de vuelta

— Eso no cuenta, quedamos que mínimo era un  " Te amo" En público, de lo contrario la apuesta se acaba.

— Pero no es justo, tu mismo viste que el me besó

— ví que se estaban dando un beso, más no que el te besó. Tu misma pudiste habérselo robado sin hablar con el, así que no es justo tampoco para mi

Suspire por que tenía razón.

— De acuerdo...

— Tengo que irme, Diana me espera

— Si, anda y vete que ahora sólo te importa ella, no hay nadie más que ella en tu mente — le reclamo

— Pues no es como que tu me hagas mucho caso, ¿ que has hecho estos dias, en donde te metiste?.

Me quedé en silencio por que tenía razón, no lo había buscado y todo por que estaba con Sebastián.

— Si es solo que.. De nuevo problemas en mi casa — le suelto como si nada

— ¿ tu mamá?

— ¿ Quien más Ricardo?

Suelto una risa con  ironía

— ¿ si sabes que solo tienes que cruzar la calle e ir a mi casa?, yo siempre estaré para ti, tu eres primero que los demás — toma mis mejillas.

— Lo se.. Ahora anda con tu amada que te espera, Romeo — bromeó y ríe.

— Si.. Creo que incómodamos a tu bad Boy — dice refiriéndose a Sebastián.

— Ni que lo digas — reímos

Ricardo se acercó a besar mi frente antes de ponerse de pie, nos despedimos y fue a donde su novia lo esperaba.

No lo podía creer, ¿ también a Ricardo?, la cajera estúpida le habia coqueteado a Sebastián y ahora a Ricardo.

¿ que seguía, Diego?, por favor, al menos puedo ver que diana está molesta y cuida de mi amigo

— ¿ quien es el?

Me sobre salte al escuchar la voz de Melissa al lado de mi, lleve una mano a mi corazón y suspire.

— Es mi mejor amigo, se llama Ricardo — le explicó

— ¿ y ella?

— Su novia, Diana.

Hace algunos gestos que no logro entender, después su cara cambia a una de asombro y se lleva sus manos a los labios

Rompecabezas | Sebastián Córdova | Donde viven las historias. Descúbrelo ahora