Historias cortas T/N
Los personajes pertenecen a Ken wakui las imágenes las tomare de Pinterest créditos a sus autores.
Soy novata espero les gusten, una disculpa por mi ortografía, soy disléxica y la 💩 mucho . Si les molesta mi forma de escrib...
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No ha pasado ni un mes y <<¡eme aquí en medio de un estupido pleito en un bar de mala muerte!>>
Este se convirtió en mi deporte favorito después de todo lo qué pasó. Solo buscaba que el dolor que sentía en el pecho se calmara con el dolor físico
Ya estaba suficientemente golpeado y apunto de desmayarme...empezaba a perder conciencia pero alcance a escuchar esa risa cínica que anunciaba que iría a casa por hoy
Reí por lo bajo, seguido de eso se escucharon estruendos al rededor no tenía fuerza para voltear a ver el espectáculo Él Siempre... ¡Siempre tan veloz para atacar!
Levante la vista y ahí está de nuevo, él.
¡No me abandono!, tal parece que no pretende hacerlo después de todo...
—¿sabes Hanma?...yo la mate, a los dos yo lo hice—balbucee algunas cosas más sin tener coherencia entre ellas
—lo sé, y mataste muchas más personas ¿por qué demonios actúas así? ya debes dejarlo ir. No podemos ir al pasado para arreglar cada cagada que damos, así que ¡supéralo de una vez!-
—yo... no puedo—
Al cabo de medio año, seguía con pesadillas sobre el momento en que yo mismo le arranqué la vida a la mujer que amaba y me daría un hijo.
Estaba en un punto de quiebre donde mi inteligencia había decaído, "sencillamente no podía pensar más"
— estar contigo se esta poniendo aburrido— reclamaba Hanma, burlándose del miserable estado que me encontraba
Además de decirme que el karma me llegó rápido y no debería quejarme de las consecuencias
—"Le quitaste a Hanagaki a su chica y tú mismo acabaste con la tuya, ¡y pensé que eras el inteligente!"... tendré que hacer algo antes de que hagas una estupidez más grande— se veía molesto tras esa sonrisa que siempre llevaba consigo
Las constantes burlas de Hanma me sacaban de quicio aunque sabía que lo hacía en su extraña manera de animarme.
Este idiota...aún así seguí con mi autodestrucción.
Por un tiempo intenté solucionar algunos problemas, pero estaba tan cegado de sentimientos, que cada solución me daba cien problemas nuevos.
Llego un punto donde creía que lo mejor sería sacarme de esta miseria volándome la cabeza con la misma arma que hice aquello, estaba inmerso en esos pensamientos que parecían ser los únicos coherentes después de tanto tiempo cuando:
