Historias cortas T/N
Los personajes pertenecen a Ken wakui las imágenes las tomare de Pinterest créditos a sus autores.
Soy novata espero les gusten, una disculpa por mi ortografía, soy disléxica y la 💩 mucho . Si les molesta mi forma de escrib...
Sus manos estaban sujetando firmemente mi cintura, sus labios en mi cuello y su errática respiración me provocaba un cosquilleó que parecía tenía como objetivo enloquecerme
—no d-deberíamos hacer esto aquí..¡ah!- es lo único que alcance a decir antes de verlo arrodillarse en el muy reducido espacio que teníamos, escuche una risa cínica de su parte
— tranquila, no hagas ruido o esto saldrá mal. Te miras realmente linda con este atuendo pero necesito saber qué hay debajo de él... relájate-
—¡¿como demonios me relajo en esta situación?!-
El recorrido que sus grandes manos hacían ascendiendo por mis piernas me ponía nerviosa
Mire como hizo mis bragas a un lado y puso sus labios, sobre mis labios inferiores para atacarlos con desesperación mientras yo ahogaba mis gemidos.
—¡hump-ahh..tsk!-
—me gustaría escucharte más fuerte cariño, pero aguanta solo por hoy- la burla en sus palabras era notoria pero estaba tan inmersa en las sensaciones, que no me quedo más que omitirlo
Él seguía besando mi intimidad y de un momento a otro introdujo uno de sus dedos de golpe en mi, haciendo movimientos que trataban de dejarme al borde de la locura
El me veía como si estuviera mirando algo sorprendente y me ponía aún más nerviosa
—¡Dios..., tú q-quier—no logre terminar de decirlo pues él ya estaba colocándose para comenzar a envestirme.
—espero que Dios esté volteando hacia otro lado en este momento— dijo susurrando en mi oído
sostenía mis piernas enredadas en sus brazos manteniéndome casi en el aire solo recargada en la pequeña esquina, el tenía la rodilla en la banca que teníamos ahí, yo no dejaba de ver la semitransparente cortina que "nos cubría" o si se abría la pequeña ventana que se encontraba en ese lugar...
~al menos hasta que deje de pensar~
Sus envestidas eran firmes y consecutivas, quería gritar, gemir, explotar, pero antes de estallar lo único que logre hacer fue aruñar su espalda y morder sus labios
—¡oh mi Dios!, eres un pervertido..—
—solo es el hermoso acto de procreación en un lugar indebido—dijo besándome y ayudándome a acomodar mis ropas...salimos a hurtadillas del pequeño lugar Justo a tiempo pues las personas se comenzaron a acercar para tomar un turno o algo así
Aún conservaba la agitación en mi cuerpo y el color rojizo del rostro, sentía la culpa y al mismo tiempo no me arrepentía
salimos tomados de las manos saludando sin demasiada atención a las personas que conocíamos
—definitivamente ¡no volveré a misa el Domingo siguiente!— le reclame Justo al subir al auto
Era mi primera vez en misa, yo no era católica y no estaba familiarizada con el ambiente
Pero definitivamente nunca había estado tan nerviosa..
—¿por qué cariño?...definitivamente "¡esa debe ser la mejor confesión de la historia!"—
—¡T-Taiju tú eres un!...—
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Espero que esta mini, mini historia les haya gustado, les mando besitos
Espero sus comentarios, si les gusto recuerden regalarme una estrellita
