(Cualquier error ortográfico me avisan)
El jefe
Diez años atrás...
El miedo penetraba cada rincón del lugar, daba pasos apurados y con tan solo una mirada, todo temblaba a su alrededor. Todos atemorizados lo miraban, con la piel de gallina, los latidos intensos y las manos sudadas.
-¿Dónde está?- dice abriendo la puerta para dar paso a su oficina y se sienta lentamente, mientras levanta la mirada fija en sus agentes.
A pesar del miedo que sentían nadie se atrevía a contestar, sabían que cualquier error en sus respuestas, podría llevarlos a su fin.
-Dije que ¡¿dónde está?!- su voz sonaba como cuchillas para quienes lo rodeaban, afiladas y llenas de sangre que no querían saber de quienes eran… aunque de algún modo ya lo sabían. Como si fuera un baile sincronizado, todos agachan la cabeza y nadie se atreve a mirarlo.
La rabia aumenta y tira la copa de vidrio que tenía a su lado. Unos de los científicos entra al lugar dando pasos lentos, se acerca mirándolo fijamente a los ojos.
-Pues jefe, se escapó- dijo alguien que sonó como el más valiente para los demás.
Mira enfurecido, aprieta el puño muy lentamente y respira hondo y exhala como si quisiera tranquilizarse.
-Pues dime, ¿cuándo se ha escapado?- el jefe estaba perdiendo la paciencia y sus palabras lo demostraban. Aunque lo dijera de manera serena, todos sabían lo que pasaba cuando el jefe se enfurecía.
-Hace una semana- traga lentamente saliva y dice, en voz baja y tartamudeando
-¿Y cómo me vengo a enterar de esto recién ahora?- dice entre gritos de odio, furia y con gran terror de lo que significaba eso.
El hombre levanta un poco más la voz, algo que podía ser un gran error -señor, usted estaba de viaje y creí que...- el jefe se acercó rápidamente quedando a un metro de distancia del tipo.
-¡¿Qué?!, qué creíste- todos quedaron en silencio por algunos segundos, dejando oír el reloj marcando los segundos inquietos por consumir lo que para ellos era tan valioso, el tiempo.
-Que estaba ocupado- el jefe se acercó a todos aquellos científicos y los miró fijamente uno por uno.
-¿Saben todos los años que perdí por ese invento?, no planeo cosas para que fallen… es mucho peor de lo que pensaba, mucho más poderoso ¡así que pónganse a trabajar y busquenlo!-.
Nadie cuestionó las palabras del jefe, solo siguieron el plan… como siempre lo hacían. Pues ellos no tenían opción, aunque en el fondo ellos sabían que alguien estaba planeando todo esto, un fraude que estaba ayudando a la falla a escapar. Todos salieron en su búsqueda, era lo que mejor hacían, encontrar cosas...
Entre las personas que caminaban en la calle, estaban unos hombres muy bien ocultos buscando a aquella falla que podría ser el salvador de la humanidad y el destructor de la mentira que se guardaba. Un plan que había salido mal, que se había salido de las manos del mismo infierno, para cambiar el destino que se estaban escribiendo.
Todo se para en una catarsis llena de una reminiscencia, que el destino nos dejó. Este mundo oculta varias cosas que nos enceguecen de la realidad incierta de aquellas páginas perdidas. Todo pasa por un hilo, en el que avanzas y cuando miras atrás, te das cuenta que el pasado es algo inexplicable… nadie puede retroceder, pero sí contemplar.
El jefe estaba viendo ese pasado, recobrandolo a la vida del presente que lo rodeaba. Sus inventos eran el futuro, eran la venganza a aquellas personas que habían enterrado con risas, un túnel hacia lo oscuro, lo impensable… el odio. Pasó varios años como escoria, sin palabra alguna frente a lo que lo rodeaba, pero logró volverse poderoso y perdió años de su vida para crear lo que luego sería "la falla", algo que enfrentaba todo los conocimientos que la ciencia nos plantea. Aunque fué demasiado poderoso, mucho más de lo que esperaban, era imparable y buscaron la única manera que les quedaba para enfrentar la situación… borrar algunas páginas del libro, cortar el hilo y asegurarse de que no mirara hacía la melancolía del pasado. Borraron su pasado como medida desesperada, como una única opción y le dieron una nueva oportunidad para que viviera como una persona normal.
Él seguiría escribiendo su libro, aunque faltaran algunas páginas y le crearían un pasado falso, pero bastante creíble para quienes lo rodeaban, hasta para la misma falla. Aunque hay veces en que la mentira es impredecible y siempre termina diciendo la verdad, con aventuradas palabras, que pueden llegar a cambiar la vida de alguien o la vida de muchas personas…
-----------------------------------------------------------
Había contado un poco de este personaje, pero desde el punto de vista del científico.
Así que ahora sabremos bien quién es el jefe.Les mando un beso a todos los terrícolas!!!!!
ESTÁS LEYENDO
El corazón de una galaxia (Parte 1)
Science FictionVivo en un mundo donde no pertenezco... ¿quién soy realmente? ¿de dónde vengo? ¿Nunca te has sentido ajeno a tú alrededor? Solo sé, que hay unos seres que me persiguen, me observan desde la oscuridad, saben algo y tienen miedo que lo descubra. Pero...