Usted lo tiene todo Señor Grey©

Capítulo 41

Pov Ana

Me despierto con un fuerte dolor de cabeza ¿donde demonios estoy?

Un lugar obscuro y un callejón.

(Melodía)

Me levantó, me miró y traigo mi vestido rasgado.

Caminó por el callejón, no puedo ver nada, todo está obscuro.

–¡Hay alguien!

– Querida Anastasia.

–¡¿Quien eres?!

– Sigue corriendo, pero no lograrás nada.

No lo pienso dos veces y sigo corriendo.

Llegó a un laberinto de flores con algunas ramas, ¿laberinto? ¿Que mierda es esto?

Escuchó el ladrido de un perro y mi mente se queda en shock.

– Oh no.

Sigo corriendo por los callejones del laberinto, pero todos me dejaban sin salida.

–¡Ayuda!

Los ladridos se escuchaban cada vez más cerca, así que mejor me quedó en silenció.

– Querida, querida.

–¡¿Quien demonios eres, habla ya?!

– Que mala educación la tuya, siempre supe que eras una arrastrada y una casafortunas.

– Usted es ¿Elena Linconl?

– Que bien te acuerdas de mi.

–¡Por que demonios me tiene aquí! ¡Dejeme salir!

– Pides mucho querida.

–¿Que es lo que quiere?

–No lo sé todavía lo pienso.

No dejó que continúe y me situó corriendo de nuevo.

No logró llegar a la salida, demonios que voy a hacer.

–¡Ayuda!

A lo lejos logró ver la salida ¡Oh gracias a Dios!

Caminó hasta llegar a la entrada veo al mismo hombre de la otra vez y a la mujer rubia Elena.

– Cuando ya esté muerta, yo me encargaré de que Christrian éste a mi lado.

– Sigo sin entender por que mierdas hacemos esto Elena.

– Venganza, esa es mi venganza, esa zorra sólo quería su dinero.

– Bien te dejó.

Veo caminar a la zorra de Elena a una cabina y al hombre en lado contrario ¿como demonios saben por donde ir?

No lo pienso dos veces y salgo corriendo antes de que me vean y puedan decirme o hacerme algo.

***

Cuando salgoze aquel lugar escuchó que las sirenas comienzan a sonar y lo perros a ladrar.

Me decido y con toda la fuerza que me queda corro aún más rápido.

Sigo mi camino corriendo, pero todas las calles están obscuras, pues claro por que ya es de noche.

Siento unos brazos en mi cintura y algo en mi boca y después ya no veo nada.

Pov Christrian

Mierda! Ana no está, nuestros bebés la necesitan y yo también, no sabemos donde ésta, todo el equipo de seguridad la está buscando.