Un diván en mitad de Midvale

Capítulo 62 La luna de Alura

Lena

Estábamos en la puerta de la casa de mis suegros mientras Alex y Sam se despedían dos días después de su boda para irse al fin a su luna de miel a Salt lake..... las dos tuvieron un poco de problemas de tiempo así que decidieron no ir tan lejos, aunque le di a Sam para que fuera a parís al menos por un mes, pero, en fin, es su luna de miel no la mía – después de las ocho, ya no le puedes dar dulces o comida..... tal vez agua o papilla.... ¡su papilla! –grito la tonta de mi cuñada mientras me explicaba la enorme lista de tareas – las recetas de su papilla están pegados en el refrigerador, a veces te pide que le des más pero no después de las ocho ¿está bien? –

–si Alex, no es un maldito gremblin– dije y kara se me quedo viendo feo – bueno ya, déjame eso y ¿Qué hay sobre los chocolates y los cigarrillos? –

–nada de cigarrillos, la vas a matar– dijo la tonta dejando sus maletas y yendo de nueva cuenta hacia su abuela, ¿Qué? ¿creyeron que nos estaba encargando a su hija? Ni que me amara tanto – adiós Alura, dejare tu carta en el cementerio ¿esta bien? – y le beso la cien, aunque a Alura no le importo demasiado o eso pensé

–aaales– dijo ella tocando su mejilla –Alex– dijo la abuela tomando sus mejillas

–si abuela, lo se.... Yo también te quiero – y deposito otro beso en si sien

–Alex, Sam se esta enfriando– dije para hacerla reír el momento se estaba haciendo muy emotivo y eso mataría el libido de mi amiga

–bueno, ya nos vamos– Alex se levanto con mucho pesar despidiéndose de mi esposa que cargaba a Josh – nos llaman por cualquier cosa–

–si ya vete– dije empujándola por la puerta, las dos tomaron sus maletas y caminaron hacia su auto nuevo que también fue regalo de kara y mío. Me despedí de Sam que me había dejado a Ruby unos días mientras mis suegros estaban de viaje a una convención de mecánicos y autos en las vegas

–van a estar bien ¿verdad? – pregunto mi esposa con nuestro hijo en brazos viendo como el auto de Alex se alejaba de poco

–si bebe, solo van a Salt lake.... Preocúpate por nosotras que mañana tendremos al terremoto danvers a nuestro cuidado –

–yo me encargo de las niñas, ya tengo una lista de lo que podemos hacer– mi esposa era muy tierna, aun pensaba que la dejaría sin ninguna supervisión, naaaah no quiero huesos rotos esta vez

La bese castamente mientras la encaminaba de nueva cuenta hacia adentro de la casa – amor, no te dejaría sola con lizzy aunque fueras el único adulto en la casa, prefiero encargarle esas tareas a Ruby – nuestros pequeños gremblins dormían arriba, nos quedamos un rato mas en lo que Alura veía la televisión y señalaba al tipo que fumaba– no Alura, tienes prohibido los cigarros, vamos a acostarnos – le dije mientras le señalaba a su habitación, jeremía y Eliza le habían adecuado una habitación en la planta baja para que no subiera las escaleras y no se cansara

–voy a acostar a Josh– dijo mi esposa yendo a la cuna de nuestro bebe

–si cariño, en un momento te alcanzo– tome del brazo a Alura para levantarla de su asiento – vamos Alura, vamos a tu cuarto –

–choco.... Chocolate – balbuceo ella señalando el cajón de los dulces

Lo dude un poco, Alex no dijo nada de chocolates, me encogí de hombros y se lo di – solo uno ¿está bien? – le entregue el chocolate mientras la encaminaba a su cuarto, hoy fue un día muy agitado para ella –hasta mañana– le dije arropándola, hacia mucho que no entraba a su recamara, tenia fotos de ella y de Zorel por todos lados, sus joyas las tenia en una vieja caja musical que su esposo le regalo en su preimer aniversario, también tenia algunos dibujos de kara en cuadros y muchas fotos de Alex en todas las etapas de su vida, aunque ella no recordara ni la más mínima cantidad de recuerdos, los atesoraba mucho, eso se notaba por como los conservaba. Sali de su habitación, mañana en la mañana la encontraría muy seguramente limpiando de nueva cuenta todo y saliendo por su desayuno, había días en los que tenia mucha lucidez y otros en las que ni siquiera recordaba comer