Capítulo 30 Prueba genética

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Lena

No necesitaba ninguna prueba genética para lo que estaba viendo, kara y Lory dormían igual, llego un punto en que sentí que no cabía en mi propia cama, las dos dormían como estrellas de mar babeando su almohada, era increíble.... tenerlas juntas era increíble, se sentía surreal, me había despertado para preparar el desayuno y solo me quede ahí embebida, mirándolas como si fuesen una obra de arte.

Baje al fin de muchos suspiros para poder hacer su desayuno, ambas eran un barril sin fondo, una prueba más de que los Danvers poseen un gen dominante y no había otro sabor que de chocolate, mis dos amores tenían los mismos gustos en todo, recuerdo que cuando Lory comenzó a caminar tenía el mismo espíritu de su madre que no se dejaba vencer por nada, mi pequeña rubia se levantaba cada vez que caía aunque se lastimara en el intento, cuando dijo su primer palabra tardo hasta casi los dos años en decir mami sin tartamudear, le costó mucho formar la primer silaba y después juntar ambas, pensé que Lory padecía del mismo síndrome que kara pero un especialista solo me dijo que no tenía ningún padecimiento, que tal vez el tartamudeo era una fase y así fue, aunque no me importaba mucho, kara fue, es y será lo mejor de mi vida y ahora había dos como ellas durmiendo en mi cama, no podía ser más feliz

–hu... huele bien – dijo una voz tierna y perezosa que sabía perfectamente bien que pertenecía a mi esposa, Lory venia en brazos de su madre tallándose los ojos porque aún no despertaba bien –te amo –Kara se acercó despacio para no tropezar y deposito un tierno beso sobre mi boca

– te amo, buen día amores – salude a ella y a mi hija con un beso

–mami, porque nos tenemos que levantar temprano, no es día de escuela– mi bebe continúo apoyando su cabeza en los hombros de kara para seguir durmiendo

–tu mami nos va a llevar de paseo, ¿verdad amor? – pregunte a kara

–si.... Vamos a ir a acampar al lado del lago, en la adolescencia tu madre y yo íbamos muy seguido con nuestros amigos, estoy segura que a ti y a tus primas les va a encantar, hace poco el bosque tuvo un siniestro, la mitad se había incendiado y nosotros fuimos a rescatar a los animalitos, el capitán Jhonn nos resguardo en el agua cuando el incendio comenzó a hacerse más fuerte, pudimos salvar a la mayoría... y gracias a eso hay un pequeño acantilado con el nombre de kara danvers...– dijo orgullosa y Lory la miraba con la misma emoción que yo, esa historia no me la sabia, tal vez esa noche iba a contármela toda

–¿es cierto eso?, es sorprendente kara– mi corazón estaba que no cabía de orgulloves amor, por eso tenemos que ir, ahora comamos para ir por tus primas–

Después de que mis dos glotonas comieron nos dirigimos a la casa de los danvers para despedirnos de Sam y Alex y de paso recoger a lizzy y a Ruby, kara tenía dos casas de acampar que eran enormes y justo nos servirían para esa noche.

cuando por fin legamos al claro de bosque adecuado debajo de las cordilleras de Salt lake Utah comenzamos a poner el campamento con mucho cuidado, Rubí estaba bastante interesada en aprender cómo se colocaban mientras que Lory y Eliza la mayor parte del tiempo jugaban con sus muñecas, nos acercamos al lago para que kara nos explicara y presumiera cual era el pequeño acantilado con su nombre, resulta que era el mismo acantilado donde hace 12 años nos habíamos aventado junto con nuestros amigos en una de las ultimas veces que estuvimos todos juntos, ya que después de ese año la mayoría emigraría a sus respectivas universidades.

El primero en irse fue Jack que siempre si fue al seminario de san francisco para servir al señor, el segundo fue james que se fue a estudiar a una escuela de aviación comercial, le siguieron lex y Alex, lex a la escuela de economía en Londres Inglaterra y Alex a la facultad de medicina en el mismo estado de Utah, no tan lejos como Winn y Maggie que fueron a la academia de policía de Texas, e Imra a la escuela de veterinaria de california, Lucy hizo filas en la marina y Mike estuvo un rato en el pueblo hasta que decidió formar parte de la academia de bomberos de Utah, para entonces kara y yo habíamos hecho solicitud en la universidad de artes de nueva york, ella para estudiar pintura y yo teatro.

Un diván en mitad de MidvaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora