[GUERRERA DEL VIENTO]

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La reina de los elfos se les queda viendo fijamente, Izuku solo tenía una preocupación y por eso tenía que irse.

Izuku: Necesito que hagas una distracción para que la gente pueda huir.

Ibara: Lo sé y ya tengo un plan.

Desde el suelo aparecieron varias plantas carnívoras que comenzaron a atacar a los elfos, Melissa solo levanta su mano y desde afuera varios soldados estaban apuntando sus flechas.

Melissa: ¡Fuego!

Desde el cielo todas las flechas en llamas comenzaban a llover, Izuku solo crea una flecha de energía y la dispara, en el aire esta flecha se multiplica para así chocar con las otras.

Izuku: ¡Todo el mundo siga corriendo!

Ibara crea una pared de tierra para que la gente tuviera tiempo de huir, Melissa provoca una ráfaga de viento y esto destruye buena parte de la pared.

Izuku: Yo distraigo a los soldados, tu ve a proteger a tu gente.

Ibara: Pero...

Izuku: Esta gente necesita a su reina para que los lidere, así que ve.

Ella solo se va mientras que Izuku bloquea la brecha con tierra, seguido de eso la luna aparece pasando de ser de día a noche.

Melissa: Esto es una guerra entre hadas y elfos, así que no te entrometas.

Izuku: Sí, yo no pienso lo mismo.

En su mano derecha crea una Morning Star y en la otra crea una espada en forma de medio luna.

Izuku: ¿Están listos?

Melissa: Matenlo.

El primer soldado se acercó pero Izuku con la Morning Star le aplasta la cabeza, seguido de eso atraviesa a otro soldado para partirlo a la mitad y luego bloquear un ataque. Ve como varios elfos intentaban escalar la pared por lo que con una mano crea un rayo para así arrojarlo y matarlos a todos.

Melissa podía ver las habilidades de Izuku, era una persona que no tenía misericordia al matar y esa mirada seria ante este tipo de situaciones. Izuku seguía esquivando ataques para luego regresarlos, en eso varias hadas aparecen desde arriba y con su magia creando un golem de piedra que los ayuda a defenderse.

Izuku: Y yo creía que los elfos tenían mejores guerreros.

Sin darse cuenta un puño ya se encontraba enfrente suyo y de un golpe es enviado lejos hasta destruir la pared de piedra, los elfos comenzaron a entrar y se dirigen al Árbol Sagrado, varias hadas estaban ahí sin la intención de pelear pero no tenían opción. Nejire aparece en ese momento para que con sus ondas los aleje y con eso ganar tiempo para que puedan irse.

Izuku: ¡Llevalos lejos de aquí!

Nejire: ¡Bien!

Mientras Izuku seguía combatiendo contra los elfos Melissa se estaba acercando hacia el árbol sin ningún problema hasta que una flecha la detiene.

Melissa: ¿Quien se atreve a detenerme?

Tamaki: Yo.

Al verlo se da cuenta de sus orejas.

Melissa: ¿Por qué uno de los nuestros está defendiendo a las hadas?

Tamaki: Soy un mestizo, así que protegeré a esta gente porque es mi misión.

Melissa: Ya veo *Desenvainando sus armas* ¿Listo para morir?

Tamaki: Tokoyami.

Tokoyami: Entendido.

Con sus dos plumas crea tanto una espada como un escudo, Melissa solo tenía dos mango sin la espada ya que estos se crean con el aire.

Tamaki: Esto no será fácil.

Ambos chocan sus armas para luego alejarse, Melissa usa el aire en sus pies para moverse más rápidos y así quedar detrás de él. Luego de eso logra darle un corte en la espalda provocando una herida profunda, Tamaki en eso la golpea con el escudo para luego arrojarlo y darle en el estomago.

Tamaki: ¡Tokoyami!

Arriba de la chica estaba el mencionado que tenía un mazo oscuro y con eso planea matarla hasta que una fuerte ventisca que lo envía lejos, después de esto crea una pequeña esfera de viento que cubre el brazo de Tamaki y le provoca graves heridas hasta el punto de casi cortarle un dedo. Viendo su mano la cubre con su rooa para luego levantarse, en su mente trataba de invocar a algún animal pero la especie que encuentra no la comprende.

Tamaki: ¿Que es esta criatura?

Melissa: Céntrate en la pelea.

Ese ataque iba directo a su cabeza pero Tokoyami aparece para empujarla hacia las casas en llamas. De una de sus plumas crea una ballesta y la dispara, pero la flecha es partida a la mitad gracias al viento y con esto el fuego se extiende por toda la zona.

Melissa: Voy a matar al traidor.

Tokoyami: Lo que tu digas.

Ahora con dos plumas crea una Kusarigama para que al momento de arrojar la cuchilla termine rosando la mejilla de Melissa, al ver su sangre solo se limpia para crear unas Sai y así correr hacia él. El cuervo usa el otro extremo del arma siendo un pequeño martillo para golpear el suelo y con eso crear una enorme grieta, la chica solo aprovecha esta oportunidad para enterar las Sai en la cadena así dejándolo atorado.

Seguido de eso vuelve a crear otras espadas para atravesarlo, Tokoyami crea un puño con púas para así darle en el abdomen, pero justo en ese momento es llamado por Tamaki haciendo que vuelva a su forma de cuervo.

Melissa: Cobarde.

Tamaki: Tokoyami, necesito que envíes otra pluma hacia...

Tokoyami: Entendido.

Tamaki: Esta detrás de ella, solo arrojala y se dará cuenta de que significa.

El cuervo solo arroja una pluma en dirección a Melissa, ella solo esquiva esto para ver que la flecha va hacia ningún lado.

Melissa: ¿Eso es todo?

Tamaki: Tengo un brazo hecho mierda, ¿qué más esperas de mí?

Melissa: No entiendo como es que eres parte de nuestra raza.

Tamaki: Yo no entiendo como es que pueden atacar a esta raza como si nada, ¿qué es lo que necesitan?

Melissa: Algo muy valioso para nosotros, pedimos ayuda a las hadas y nos la negaron. Así que decidimos tomarla por la fuerza.

Tamaki: (Aun necesito tiempo para que venga) ¿Acaso ves cuanta gente ha muerto en esta guerra? ¿Es qué no te interesa eso?

Melissa: Nuestra gente también muere, no lo entenderías ya que no has vivido en nuestro territorio.

Tamaki: Y creo que no lo haré.

Melissa: No me interesa, así que muere.

Al instante en que iba a matarlo aparece una onda para bloquear el ataque, Melissa iba a ir por el responsable y al ver su pie se fija en unas lianas que la terminan arrojando muy lejos contra el suelo.

Nejire: ¡Tamaki!

Tamaki: Por fin llegas.

Ibara: Esas heridas no se ven muy bien.

Varias flores rodearon el brazo del chico y con eso comenzaron a curarlo.

Melissa: Reina Ibara, es un gusto verte.

Ibara: Reina Melissa, te atreviste a atacar mi hogar primero y ahora pagarás las consecuencias.

Melissa: Entonces intentalo.

Nejire: Hay que ganar tiempo hasta que la gente salga de aquí.

Ibara: Cuento contigo, cuñada.

Nejire: ¿Qué dijiste?

Ibara: Nada, solo enfocate en la pelea.

Nejire: Entendido (¿Me llamó cuñada?)

Fin de la Parte Treinta.

Mi Querido Familiar - Izuku x Nejire -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora