𒈞 En esta historia habrán varios lugares, hechos y animales inventados.
𒈞 No está apegado a la historia oficial de los países. Es pura ficción
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Vaquita 🐮☁️
12 de octubre de 1492
—¡CAPITÁN!, ¡TIERRA A LA VISTA!
Escuché el grito de un tripulante desesperado al ver la isla. Hace tiempo no tocábamos tierra firme y estuvimos muchas noches surcando en los mares.
—¡Preparen los cañones y detengan el barco!
Dí la orden y todos mis subordinados la cumplieron. A los pocos minutos el barco ya estaba en la orilla. Fui el primero en subir en la tierra firme luego de ponerme el abrigo más abrigado del barco. Un abrigo de tres distintos pelajes de animales exóticos de islas tropicales
Mis hombres iban armados por cualquier posible amenaza. Por todo el tema actual de las múltiples colonizadores que han estado ocurriendo no querría tener problemas con otros países metidos. Ya había tenidos unas cuantas discusiones con el Imperio ruso y el Imperio Español por unas estupideces.
Caminé por el suelo plagado de una cantidad abismal de nieve.Mis piernas estaban cubiertas de nieve hasta las rodillas. Era impresionante, casi me sentía que me ahogaría entre ella. Caminamos con mi grupo por horas hasta que no tuvimos de otra que acampar cuando el cielo se tornó oscuro. Antes de que la oscuridad inundara todo el lugar, unas luces verdes se vieron brillar en el cielo de la noche. Me quedé mirando el fenómeno por mucho tiempo. Si mal no recuerdo mi pariente Noruega también me había mencionado de haber visto esas luces seguido, pero nunca le había creído hasta ese momento que las ví por mis propios ojos.
Juro que ni me dí cuenta que pasaron horas. Seguía observando incluso la nieve. Parecía tan entretenido aquel lugar nuevo, pero al mismo tiempo parecía ser como un desierto de hielo.
Unas luces que parecían luciérnagas brillaron en lo lejos. Pensé que realmente eran esos insectos, hasta que las luces se volvieron mucho más grandes y pude divisar personas abrigadas hasta la cabeza de ropas mucho más cálidas que las mías.
Yo y mis hombres nos pusimos en guardia y cada uno alzó su arma, excepto por mí, tan único y diferente. Me pare y dejé de apreciar el paisaje y me puse en pose de defensa. Me agrada usar armas,pero prefiero tener peleas de mano a mano.
