—Eres tú—
Se repetía en la cabeza de Korapat mientras el rojo de los ojos ajenos va disminuyendo, podía ver como el color del fuego se apagaba en ellos, no supo que hacer solo se quedó parado observando al intruso frente a él; después de unos momentos, el contrario le preguntó;—Deberías calmar ese aroma, vas a atraer a un puñado de Alfas— musitó con una voz un tanto más tranquila, Korapat desvío la mirada insatisfecho de aquellas palabras por qué no eran cosas que no supiera, como no quería discutir simplemente dió un paso hacia delante y continuó su camino ignorando al recién llegado.
Caminó unos pasos cuando se advirtió que lo seguía, entonces avanzó más rápido y más rápido intentando perderlo entre tanta gente, el bullicio del comienzo de la carrera le permitía desplegarse entre ellos pero era obvio que jamás perdería la pista, mientras intentaba huir tan rápido como le fuera posible tuvo un incidente con otro Alfa a quién no conocía y nunca en su vida había visto, el hombre regresó a verlo en el momento en que los pies de Korapat se tropezaron con la bota enorme del sujeto, el grupo de chicos que acompañaban al hombre comenzaron a reírse y a burlarse de korapat que no estaba de humor para escucharlos, los enfrentó señalandolos con el dedo, diciendo— imbéciles—Entonces el hombre con el que había tropezado le preguntó
—¿qué dijiste?—con una voz imponente, como si tratara de ordenarle, entonces korapat sonrío, porque esas palabras no hacían efecto en el, le quedó mirando como retandolo con la mirada, Entonces el grupo de personas lo rodearon, pensaban darle un escarmiento en plena carrera, Ohm que estaba muy cerca de ellos se quedó observando cuando lo rodearon, pero estaba dispuesto a intervenir si las cosas se salieran de control , pero grande fue su sorpresa que al cabo de un momento korapat se abrió pasó entre el grupo de personas, el aroma que expedia y que llegaba hasta las fosas nasales de Ohm no era con el qué había conocido hacia unos momentos atrás, eso le pareció bastante curioso, así que continúo siguiendole, entonces korapat no lo soporto más y detuvo su pasó.
—¿Qué quieres?,¿por qué me sigues?— le dijo a gritos,Ohm solo atino a decirle —Te estoy resguardando y no deseo que te ocurra algo malo—, Korapat le observo con cautela, si tragarse ese comentario,
—estuve rodeado por personas y sali airoso de todo, yo mismo me puedo cuidar, no necesito que nadie me resguarde— sus palabras fueron en un tono rudo, Ohm se quedó en silencio, pero cuando vio que korapat le llevaba una ventaja de al menos una cuadra continúo siguiéndole, su curiosidad no sé detenía, ahí él tenía muchas dudas y esa persona le parecía más y más y más interesante sin importar lo que le había dicho, Lo continúa siguiendo hasta alejarse completamente de la avenida principal dónde se efectuaba la carrera, la calle estaba muy oscura y el aroma en las fosas nasales de Ohm era más intensa, tenía precaución de no perder el sentido, pero sabía que podía seguir consiente, se sentía fuerte y a la vez paciente, dos cosas que no muy seguido tenía.
Korapat volvió a detener su pasó enfrentando nuevamente a Ohm, —¿ quién diablos eres? ¿por qué me sigues?,déjame en paz, si no lo haces llamaré a la policía —
—llamalos, necesito investiguen a alguien sospechoso-—
—¿sospechoso?¿ Te refieres a mí? ¿y yo por qué tendría que ser sospechoso ?,el sospechoso eres tú, qué me sigue.-—
—te sigo porque creo que ocultas algo.-—
—no oculto nada-—
Ohm miró a Korapat muy intenso, conteniendose de golpearlo, tenía una necesidad tremenda de tomarlo por la mano y llevarlo a un refugio, pero el chico era tan necio, aunque obviamente no podía culparlo, ni siquiera se conocían
—bien, si no ocultas nada entonces me dirás qué tipo de aroma tienes en realidad, Porque a lo largo de la avenida e identificado más de cinco aromas diferentes en ti, eres un Omega bastante peculiar, quién entre tu especie, es de lo más relevante ¿ no lo crees ? —
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Eonia alma [OhmNanon]
LobisomemHistoria de dos lobos que aún sin conocerse ya son destinados y nadie ni siquiera ellos mismos lo saben. Tendrán que luchar por descubrir ese destino y protegerse en el camino, inclusive de ellos mismos.