Eonia alma [OhmNanon]

CAPITULO CINCO.- T S U N A M I

Comentario: hola a todos. No sé si está historia está siendo de su agrado; la escribo para dar a conocer a la pareja, Ojalá dejen muestras de apoyo, si les gusta o no como va, ya casi se acerca la tormenta en la historia y quisiera saber si hay algo que no se entienda para modificarlo. Espero su ayuda. Saludos a los que leen la historia. Sus estrellitas también me ayudan; gracias.

Korapat se sentía flotando, exactamente como flotaba la balsa sobre el rio, pero también parecía que podía volar como un ave libre sobre el cielo oscuro, podía tocar las nubes de algodón  o inclusive bajar una estrella de la noche con solo estirar la mano, metafóricamente era así, pero solo estaba tocando a Ohm, al menos lo que la balsa en movimiento se los permitía, para Korapat era la primera vez que se fundia en unos labios de manera desesperada, pero si le hubieran dicho lo relajante que era,lo hubiera intentando hacía mucho tiempo atrás, le atribuia al aroma a hierbabuena que Ohm despedía,  le relajaba mucho, mientras le olía su mente recordaba las veces que su Padre New le daba a beber ese té cuando estaba enfermo. Oler la hierbabuena no hacía más que desear más. 

Durante el quinto beso comenzó a acoplarse,y la mezcla del aroma a menta se intensificaba, nunca habría creído que la menta fuera uno de los aromas más placenteros, hasta ahora, era tan placentero como lo era el chocolate o el café para la mayoría de las personas que estaban a su alrededor;  ahora podía seguirle el ritmo a Ohm que desde el principio parecía guiarle, otros en su lugar se sentirían perdidos, confundidos o hasta nerviosos de no saber que hacer, pero Korapat estaba lleno de confianza, no sabía cuál era la razón, pero deseaba seguir besandolo, era el calor del cuerpo y el aroma de Ohm lo que los tenía perdidos a él y a su lobo,

"Estúpido Ohm" pensaba.

Sus dedos ya habían recorrido los fuertes brazos de Ohm, de arriba hacia abajo, su omega regocijaba al sentirse acariciado, Korapat trató de obligarlo a quedarse quieto,se suponía que debía controlarlo,lo había leído en la biblioteca que los omegas eran de los seres más sensibles y perceptivos que habían, pero comenzaba a entender porque muchos se pierden en el placer, no podía seguir pensando en ello, que importaba, lo único que importaba era seguir besándose, seguir explorando, seguir tocando esa piel, seguir intentando rendir al más alto, su imaginación comenzó a volar, se miraba siendo sostenido por los brazos de Ohm mientras le quitaba la ropa, sintió las mejillas arder, así que se separó a regañadientes de su lobo que le hablaba y le gritaba que no se le ocurriera echar a perder la atención que ya consiguieron, pero tenia que poner en orden las ideas, poner estable su corazón, su cabeza y su cuerpo. Respiró apenas se separó, se relamió los labios sintiendo el dulce sabor de Ohm todavía, hierbabuena, la jodida y querida hierbabuena estaba por todo su paladar.

 -¿como se llama?... me refiero a tu lobo?- preguntó Ohm en un tono sutil, como si no quisiera ahuyentarlo con su ronca voz, Korapat cerró los ojos apretando los brazos de Ohm en esa distancia, estaba peleando por no decirlo, porque decir el nombre de tu lobo era un tema exclusivamente para tu familia o allegados, en tailandia dependería mucho del clan del que provienes si decirlo o no, a veces solo tu pareja lo sabía, pero había personas a las que eso no les importaba, por eso la sociedad las juzgaba como promiscuas,  pero la voz del alfa, que aunque no era de mando estaba produciendole chispas en el estómago que iban hacerle explotar, sino respondía,  su respiración continuaba siendo errática,