Entre mundos [Jack y Elsa]

VI

Llegamos al bosque encantado. Elsa había cabalgado al caballo mientras yo iba atrás de ellos volando.

–Por que no se puede ver el bosque? ,—pregunto mientras aterrizo a lado de Elsa.

–Es para protección, hice un tipo de hechizo para que desconocidos no puedan verlo, ven .—Elsa me toma de la manga del abrigo y me guía.

Llegamos al bosque, es increíble, se siente la magia ni bien se pone un pie en ese lugar, se siente una cálida tranquilidad también.

–Ven Jack, te presentaré a los demás.

Después de un largo rato de saludos y bienvenidas por parte de las personas que habitaban en aquel lugar me quedo con Elsa sentados en una gran colina, disfrutando así el paisaje del Reino.

–¿que te pareció? ¿Te gustó el bosque? ,—me pregunta animada, yo asiento con la cabeza ,—fantástico, por cierto, ya se me ocurrirá algo para regresarte a tu hogar.

–Si... Creo que será más difícil de lo que pensé.

–¡Un momento! Los trolls, como no se me ocurrió antes...

–¿Los que?

–Son unas criaturas que en su momento me ayudaron con mis poderes, tienen todo tipo de conocimiento acerca de la magia, de seguro sabrán como regresarte.

–Entiendo. Pero... ¿Podemos confiar en ellos?

–No te preocupes, las personas de Arendelle están acostumbradas a ver magia por aquí. Los iremos a visitar en unos días para que puedes adaptarte un poco mejor al lugar, no sabemos si hallarán una solución que sea rápida.

–Entendido, y... Muchas gracias Elsa, no tenías por qué ayudarme y aún así lo has hecho desde que llegué.

–No es nada .—ella sonríe amable y yo le devuelvo la sonrisa.

...

–¡Vamos Elsa, será divertido!

Han pasado dos semanas, Elsa y yo nos hemos divertido mucho ayudando a las personas del bosque, también hemos desarrollado una gran amistad entre nosotros.

–¿Estás seguro? Jack, no creo que sea una buena idea...

–Confías en mi, ¿no?

–Si pero...

–Entonces ¡que estamos esperando! ,—tomo a Elsa de la mano y nos vamos volando.

La idea de congelar el desierto le pareció un poco interesante después de todo.

–¿Sabes como deshacer lo que hagas con tu magia?

–Sip, no te preocupes por eso.

–Bien... Aquí vamos.

Elsa y yo nos tomamos de la mano y con la mano que teníamos libre creamos una gran nube de nieve.

Descubrimos que al fusionar nuestros poderes estos se fortalecen más.

–¡Mira Jack, funcionó!

–Te dije que no sería una mala idea.

¿Nuestro propósito? Congelar las partes del desierto que tuvieran escasez de agua, así al recibir sol se iba a derretir y las personas podrían tener más.

¿Era arriesgado? Si ¿el plan tenía algunos fallos y era probable de arruinar todo y que acabara mal? Si.

Pero eso no nos detuvo, quería ayudar a tantas personas que pudiera ser posible y Elsa pensaba de la misma manera, eso es una de las cosas que me gustaba de ella, estaba dispuesta a ayudar a los demás al igual que yo.

–Jack, mira, ese grupo de niños se nos acerca.

–Esa es nuestra señal para irnos, vamos.

Elsa con sus poderes hace que les caiga bolas de Nieves a la cara de los niños, provocando que se les dificultara ver y así podamos escapar sin ser vistos.

–El mundo aún no está listo para personas como nosotros ,—menciona Elsa desanimada mientras está sujetada a mi mano ya que estamos volando.

–Lo sé, en todos mis años de vida lo he notado, quizá las cosas siempre tengan que ser así, un cuento solo para niños.

–Debió ser difícil estar tanto tiempo solo.

–No estaba solo, solo que ellos no podían verme.

–No te preocupes ahora tienes amigos incluso de otro mundo ,—le sonrío.

Llegamos a Arendelle.

–Mañana hablaremos con los trolls, descansa ¿si?

–Hasta mañana Elsa.

–Descansa Jack Frost ,—ella me sonríe y se va.