Tus huellas sobre el hielo ✓ [ Parte I y II ]

Capítulo 15

Durante el segundo descanso, Juyeon fue uno de los primeros estudiantes en poner un pie dentro de la cafetería, ansioso por asegurarse una de las mejores mesas con vista al centro de la sala. Quería presenciar de cerca el espectáculo que, seguro, se desataría cuando Taehyung y Seokjin se enfrentaran al equipo de hockey. La tensión entre ellos era casi tangible, y Juyeon no quería perderse ni un solo detalle.

Él no se consideraba alguien rencoroso, pero la memoria de la humillación que Kim Taehyung le provocó en el patio del colegio aún ardía en su interior. El recuerdo de las risas y las burlas de los demás estudiantes aún resonaba en sus oídos, y no iba a dejar que Taehyung se saliera con la suya. Debía lograr estar dentro de la jugada otra vez, no solo para recuperar su orgullo, sino para demostrarle a Taehyung que no era alguien que se pudiera pisotear impunemente.

Juyeon sabía que para herir a Taehyung debía irse contra Jimin, el punto débil de su enemigo, el eslabón más vulnerable en la armadura de Taehyung. Y no tenía problema con ello, al contrario, le parecía un plan perfecto, una jugada maestra. Podría matar dos pájaros de un tiro: lastimar a Jimin, como tanto le gustaba, satisfaciendo su sed de venganza y control, y joder a Taehyung, como tanto deseaba, destruyendo su estabilidad. Y como la cereza de ese delicioso pastel, Seokjin caería también, sin siquiera darse cuenta de lo que estaba sucediendo, un peón más en el juego de Juyeon.

Sonrió para sí mismo al recordar la jugada que había hecho. Había utilizado al equipo de hockey, y especialmente a Min Yoongi, para herir a Jimin de la manera más profunda posible. Sabía que Jimin detestaba a Yoongi, y que un insulto viniendo de él sería como una puñalada en la espalda. Y había funcionado. Haber visto el rostro lleno de desilusión y dolor de Jimin le había causado una satisfacción indescriptible, una sensación de poder y control que lo había llenado de una emoción casi orgásmica.

—¿Qué se supone que estamos esperando? —Younghoon tomó un lugar en la mesa junto a Juyeon, mirando a su alrededor con curiosidad.

La cafetería estaba llena de estudiantes que parecían estar esperando algo, y Younghoon podía sentir la tensión en el aire.

—El fruto de mis malas acciones. —Respondió Juyeon con una sonrisa maliciosa, disfrutando del espectáculo que estaba a punto de desencadenar. —Te aseguro que en cualquier momento uno de los estirados entrará por esa puerta, caminará a la mesa de Golden Kings y se desatará el caos. Y cuando eso suceda, todos verán el verdadero rostro de Taehyung y Seokjin.

Cuando Juyeon decidió modificar la encuesta de “¿Qué patinador es mejor?’ a “¿Con quién de los estirados tendrías sexo?”, no tuvo dificultades para convencer a los estudiantes de Lé College Rosé de que firmaran. La mayoría asumió que, dado que se trataba de Park Jimin, Yoongi estaba detrás de la idea.

Sin embargo, Yoongi no tenía intenciones de molestar a los patinadores, al menos no por el momento. La última broma le había costado su pista de hielo, y no quería repetir la experiencia.

—¿Cómo puedes estar seguro de que Jimin se tragó esa mentira? —Younghoon preguntó con duda. —El hecho de que haya visto esa lista no significa nada. Quizás deberías intentar con algo más convincente.

—Estoy seguro de que lo creyó. —Afirmó Juyeon con confianza. —De lo contrario, Taehyung y Seokjin no estarían caminando hacia la mesa del equipo de hockey con esa cara de ira. —Sonrió para sí mismo, listo para presenciar el espectáculo que había planeado.

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—¿Estoy alucinando o Seokjin viene hacia acá junto a Taehyung? —Yoongi entrecerró los ojos, como si no diera crédito a lo que veía. Le diría a Namjoon que le diera un pellizco en el brazo para asegurarse de que no estaba soñando. Otra opción era pedirle a Jungkook que lo abofeteara para comprobar si estaba en la realidad.