Capítulo 13

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⚠️⚠️⚠️⚠️ADVERTENCIA⚠️⚠️⚠️⚠️

Este capítulo contiene escenas de violencia sexual. Si es menor de edad o es sensible a esta clase de contenido, le sugiero que no lea el presente capítulo y salte al siguiente...

⚠️⚠️⚠️⚠️ ADVERTENCIA⚠️⚠️⚠️⚠️

El chico tomó ambos hombros de la chica y la empujó hasta acostarla sobre la cama, ella se mantenía en silencio, pero temblaba de miedo. Una sola mirada de la jóven era un grito de ayuda y por ello, se convertía en una lastimosa pena que nadie estuviese allí para ayudarla.

El chico se subió sobre ella relajando el trasero sobre la pelvis de esta – Suspiró y sonrió – Él la miraba detenidamente, sus ojos recorrían cada espacio de su piel, parecía como si quisiera guardar ese momento en su memoria para siempre, por eso no dejaba pasar ni un solo detalle o al menos eso decía su mirada profunda.

El chico deslizó sus manos con suavidad sobre la cintura de la chica, las fue moviendo hacia arriba, poco a poco, lentamente – Por favor no – Sus manos tocaron los pechos de su amada y los envolvieron como un embudo, de la misma forma hizo presión sobre ellos – Gimió de dolor – Él seguía manteniendo su expresión neutra, parecía muy concentrado en lo que veía. Observaba el rostro de la chica, cada expresión que hacía, cada movimiento de su cuerpo, quería guardarlo todo en su memoria para no lo olvidarlo jamás.

Bajó sus manos nuevamente hasta tomar el borde inferior de la blusa, la levantó y se la quitó – No logró reprimir el llanto y brotó sus lágrimas al igual que una fuente – Tiró la prenda a un lado y continuó con el sostén de su novia, tomando la espalda de ésta, la llevó hacia él abrazándola – Se movió con fuerza para intentar fugarse de los brazos del chico, pero éste la abrazó con más determinación al punto de asfixiarla – Él no pudo soportar más lo ruidosa que se volvía, así que desabrochó el sostén, la arrojó con vigor a la cama y con una fuerte bofetada calló sus lloriqueos.

– Guarda silencio si no quieres que te duela. Intento ser amable contigo

– ¡No quiero! – Continuaba negándose

– Lo vas a disfrutar, ya verás – Se inclinó y besó los pezones de la chica mientras esta mordía sus labios para contener los gritos de llanto que le producía su desesperada situación – Lo ves, ya empiezas a sentir placer – El chico sonrió y pasó su lengua por en medio de los pechos de la jóven dejando una línea de saliva entre ellos, subió hasta su cuello y empezó a besar desesperadamente.

El chico succionó el cuello de la chica haciéndole un gran chupetón en él. Sentía como si acabase de marcar su territorio, así que sonrió sobre la piel de su amada mientras ella lloraba e intentaba imaginar cualquier cosa que la transportara de ese lugar, que la hiciera sentir que no estaba allí. Ella sentía tanto asco que quería morir en ese instante.

– Que lindo, este chupón combina con tus moretones – El chico disfrutaba ver el color rojizo y morado sobre la piel de su mujer – Te ves sexy – Continuó besando el cuello de la chica desmedidamente mientras su mano izquierda se deslizaba hasta la pretina del pantalón, una vez allí, la deslizó debajo de ésta y de la ropa interior para llegar hasta su vagina y empezar a masturbarla – No lo hagas, te lo suplico – El chico movía sus dedos en círculos y de forma vertical, frotaba el clítoris de su amada con movimientos suaves inicialmente, pero luego los hizo rápidos y negligentes – Me duele – Aquella mano lujiriosa se cansó debido al arremetimiento por lo que se detuvo y sacó sus dedos mojados.

– Chúpalos – Ordenó el hombre con una mirada de locura desenfrenada

– N... No – La chica no podía creer lo que le pedía. Deseaba salir corriendo de ahí, no quería soportar más lo que sucedía

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